María Agustina Estigarribia padece problemas traumatológicos. Su médico tratante del Hospital Distrital de San Juan Nepomuceno le solicitó dos radiografías y, atendiendo a que el equipo de rayos x del local asistencial no funcional, debió recurrir al sector privado. Pagó G. 130.000 por cada estudio, es decir, G. 260.000 en total.
“La poca plata que llevé se me terminó y tuve que pedirles auxilio a mi gente para comprar los medicamentos que me recetó el médico y para volver a mi valle. La ventaja es que para los estudios de rayos x y las farmacias abundan frente al hospital”, relató la paciente.
El director del Hospital Distrital de San Juan Napomuceno, doctor Fabián Vera, indicó que el equipo de rayos x se encuentra operativo, pero que está con problemas el tambor que se utiliza para el revelado de las placas. Explicó que implemento ya no retiene el líquido para el revelado, por lo que se pidió otro nuevo.
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Con relación a la falta de medicamentos, el doctor Vera indicó que siempre hay escasez, que es difícil saber la lista de los remedios disponibles, pero que cuando tenga tiempo verificará.
El tambor de revelado podría tener fácilmente 20 años y ya es totalmente obsoleto. Además, el equipo de radiografía se encuentra en una dependencia no adecuada para el funcionamiento, indicó una fuente que pidió proteger su identidad por temor a represalia.
Seria oportuna la adquisición de un equipo para revelado moderno, que el personal blanco no se exponga tanto con los líquidos tóxicos, añadió.
Las paredes no cuentan con la aislación requerida para una sala de rayos x, que debe ser de plomo. El personal asignado al área se expone a radiaciones porque no tienen el chaleco de plomo y el collarín para su protección. La radiación puede afectar incluso a pacientes embarazadas que cruzan cerca de la sala de rayos x, de acuerdo con las explicaciones.
UTI sin agua potable
La Unidad de Terapia Intensiva (UTI) del Hospital Regional de Caazapá no tiene suministro de agua potable para los pacientes.
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Según los datos, el problema de falta de provisión de agua potable afecta a todas las dependencias del Hospital Regional de Caazapá, que cuenta con dos pozos artesianos, con bomba y tanque propio, pero no abastece.
Los pacientes pueden comprar en las farmacias los medicamentos que faltan y también agua en botellas para beber, pero para el higiene personal, para uso de los baños, para asear a los pacientes, especialmente los que están en UTI, no se puede traer en baldes, lamentó un médico.
Intentamos hablar con el director del Hospital Regional de Caazapá, doctor Luis Dávalos Sosa, pero no atendió nuestras insistentes llamadas telefónicas.
El director de la Sexta Región Sanitaria, doctor Amílcar Miño, explicó que pese a los esfuerzos que están realizando los funcionarios no se está encontrando la falla en el sistema de suministro de agua potable. La red de cañería interna está perdiendo agua y no se encuentra dónde, explicó.
Miño indicó que hay agua, pero no lo suficiente. La verdad es que se debe perforar otro pozo para poder abastecer a todo el Hospital Regional Regional, dijo.