El director del Hospital Regional de Encarnación (HRE), Dr. Jorge Ayala, anunció en conferencia de prensa la mejoría gradual de la niña de 10 años, proveniente de Carlos Antonio López, internada en la Unidad de Terapia Intensiva Pediátrica (UTIP) desde el pasado 13 de mayo, debido a un supuesto abuso sexual.
Según Ayala, la pequeña necesita cada vez menos medicación y su estado hemodinámico ya se encuentra estable. No obstante, todavía permanece con respiración asistida artificialmente.
Si bien se evidencian mejorías en su estado de salud general, la niña permanece en UTIP, por lo que su pronóstico sigue siendo reservado. Cuando abandone la terapia intensiva se podrá confirmar que ha mejorado el pronóstico, afirmó el director del HRE.
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El caso
El hecho tomó estado público luego de que la niña necesitó una intervención quirúrgica ante la gravedad de su estado de salud, que presentaba una infección generalizada. La misma había llegado hasta un Centro de Salud de su comunidad en Carlos Antonio López con malestares el pasado 10 de mayo.
Al activarse los protocolos por la presunción de abuso sexual, la menor fue inspeccionada por una médica forense del Ministerio Público, que indicó en su informe, no había rastros de abuso. Dos días después, la niña vuelve al centro de salud en un estado grave, por lo que fue trasladada hasta el HRE.
El agente fiscal de la causa, Gustavo Riveros, ordenó la detención del hermano mayor de la víctima, un joven de 20 años y de la madre de 45. Ambos fueron imputados por abuso sexual en niños y la madre además, por violación al deber del cuidado.
Los detenidos por esta causa permanecen con prisión preventiva, recluidos en el Centro de Rehabilitación Social (Cereso) de Itapúa.