Unas 450 familias corren serios riesgos de perder sus casas, debido a que están instaladas al borde del Arroyo Fortín, y con las últimas lluvias, el terreno va erosionando y se formó una enorme zanja en la zona que va corriendo hacia las construcciones.
Varias viviendas ya fueron afectadas por el desmoronamiento tras las últimas precipitaciones. Los afectados claman una urgente solución a este problema, antes que ocurra una tragedia.
“Una parte de mi casa ya cayó al barranco, por suerte pudimos rescatar mis cosas, pero estamos pasando un momento muy difícil, porque con otra lluvia grande toda la construcción caerá al arroyo”, relató la afectada Lidia Ferreira.
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Dijo que toda su familia se mantiene en el lugar porque no tiene dónde ir; prácticamente pasan en vela todas las noches por temor a que la casa caiga al barranco, debido a que la erosión continúa en forma permanente.
Políticos prometen y no cumplen
Otro de los vecinos afectados es Bartolomé Chamorro, cuya casa se encuentra al borde de la zanja. La erosión ya afecta el cimiento, toda su familia también vive en zozobra y clama la ayuda para defender su construcción.
“Hace más de 25 años que vivo en este lugar, y con cada lluvia la erosión se agranda hacia nuestras casas, y el Ministerio de Obras Públicas (MOPC) no continúa con la construcción del muro de contención y ya las edificaciones están a punto de caer al arroyo”, expresó Chamorro.
Se quejó de los políticos inescrupulosos que llegan durante las campañas electorales y prometen solución al problema, pero una vez que asumen se olvidan de sus compromisos. Muchos ya abandonaron sus casas por temor.
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Solo falta voluntad política
Por su parte, el intendente municipal Sergio Estigarribia (PLRA) indicó que el proyecto de construcción de muro de contención en la zona está y que solo falta voluntad política del Gobierno para ejecutarlo, pues de lo contrario muchas familias perderán sus casas.
“El proyecto del segundo tramo de la canalización del arroyo ya está en su totalidad, solo falta ejecutarlo, y lo único que faltaría es voluntad política de parte del MOPC, porque acá muchas familias podrían quedar sin sus casas, porque la zanja está corriendo”, expresó el jefe comunal.
Dijo que el tramo proyectado para la construcción de muro es de 3 kilómetros, que va desde la calle Ypacaraí hasta el la ribera del río Paraguay. Agregó que en esta franja se encuentran niños y adultos mayores.
Resaltó que es urgente la canalización del cauce, porque más de 400 casas están en riesgo de derrumbe y la municipalidad no cuenta con recursos para asistir a los afectados.