En la semana, la municipalidad de la capital del segundo departamento, San Pedro de Ycuamandyyú, inauguró obras de mejoras en el acceso a la ciudad, así como una fuente de agua como atractivo y de bienvenida. Estuvieron presentes el intendente Carlos Quiñones (ANR-HC), concejales y el gobernador Freddy D´Ecclesiis, y con participación de la ciudadanía y show de fuego artificiales habilitaron lo que denominan “nuevo rostro” de San Pedro.
También en la ocasión, en diálogo con la prensa, el jefe comunal explicó que se pone en marcha el plan “Ciudad segura” instalando cámaras de circuito cerrado en varios puntos de la ciudad, en sitios estratégicos y de mayor concurrencia. Manifestó que ya entraron en funcionamiento las cámaras y las contralan desde la institución municipal, pero señaló que dotarán de equipos de monitoreo a la comisaría local para coordinar las tareas y control con la Policía Nacional, de tal forma a buscar transmitir mayor seguridad en la ciudad, manifestó el intendente.
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Igualmente, el jefe comunal anunció el inicio de la construcción de un moderno polideportivo municipal en el barrio San Rafael, dentro del plan de apoyar la práctica del deporte y de dotar de infraestructura para las prácticas. Informó del avance de los trabajos de refacción y renovación del polideportivo municipal que se sitúa detrás del edificio municipal. Desde la municipalidad también entregaron atuendos deportivos a los 8 clubes de la liga sampedrana de deportes para la temporada del campeonato local.
Para este mes de febrero se anuncia una gran fiesta de carnaval como atractivo de integración y para incentivar el turismo. Dentro del mismo plan, los fines de semana la avenida principal se convierte en peatonal y los restaurantes habilitan las avenidas para compartir en familia. Para el mes de marzo se prepara un gran festejo del aniversario de la ciudad, con variadas actividades de integración y la vuelta del Festival del Jejuí.
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La ciudad de San Pedro requiere de muchas mejoras: las calles están en pésimas situaciones, los espacios públicos necesitan ser recuperados, el vertedero municipal urge optimizarse, falta liberar las veredas que ocupan los comerciantes en general, la terminal de ómnibus está en deplorable estado, producto del lamentable manejo que tuvo en su momento el colorado cartista Gustavo Rodríguez, que dejó la institución a la deriva y la ciudad en ruinas.
Un grupo de corajudos ediles y un puñado de ciudadanos, aglutinados en la contraloría ciudadana, denunciaron y se movilizaron, lograron la intervención de la Contraloría y en su momento se detectó un daño patrimonial de unos G 18 mil millones. Ante la inminente destitución, el intendente renunció. Se volvió a llamar a elecciones y asumió Carlos Quiñones para completar el mandato.