No es voluntad de Dios que haya tantas injusticias en Paraguay, según el fray Édgar Toledo

El fray Édgar Toledo predicó la misa vespertina en el tercer día del novenario de la Virgen de Caacupé. Durante su homilía mencionó que no es voluntad de Dios que haya tantas injusticias en Paraguay. Lamentó que haya campesinos que no son escuchados, indígenas que son desalojados de sus tierras e incluso asesinados. “No es voluntad de Dios”, expresó.

El fray Edgar Toledo, predicó la misa verpertina en la basílica de Caacupé.
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La misa vespertina del tercer día del novenario de la Virgen de Caacupé fue predicada por el fray Édgar Toledo, quien cuestionó duramente la realidad del Paraguay. Resaltó que “no es voluntad de Dios que haya tanta injusticia en nuestro país”.

“No es voluntad de Dios que haya campesinos que no son escuchados, indígenas desalojados de sus tierras e incluso asesinados no es voluntad de Dios eso”, dijo el religioso.

“Hay políticos que solo se preocupan de estar mejor. No es voluntad de Dios, no nos engañemos cuando el pueblo paraguayo no tiene salud gratuita de calidad ni escuelas ni colegios dignos donde reciban educación de calidad. No es voluntad de Dios, el Espíritu Santo nos hace comprender esto, no es voluntad de Dios”, señaló.

El fray Toledo añadió que hay que denunciar estas realidades que salpican, golpean y hacen sufrir a la gente. Mencionó que nuestra oración no puede ser solo analgésico.

“A veces oramos solo cuando necesitamos y queremos que Dios nos escuche. No pensamos en los demás, a veces nos enojamos e incluso decimos que Dios no nos escucha o no nos da lo que pedimos. La oración nunca debe ser analgésico para estar bien sin pensar ni influir en otros hermanos más empobrecidos”, explicó.

Jóvenes en la calle y abuelos en la miseria

El fray Toledo también mencionó que es muy importante preguntarnos qué hace el Estado con los niños de la calle, con los jóvenes chespis que tenemos en nuestros barrios y con los abuelos y abuelas que viven en la miseria en todo el país.

Refirió que el Espíritu Santo nos hace comprender la realidad sufriente para que oremos y para también nos comprometamos a hacer algo al respecto.

Finalmente recordó lo que se sufrió en el 2020 por el Covid-19. “Ahí la gente se dió cuenta de la importancia de respirar”, enfatizó el Fray Toledo.

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