Los procesados por la muerte por electrocución de “Rolo”, como era conocido Rodolfo Núñez Scolari, ocurrida en el complejo deportivo “Los Arrayanes”, son los arrendatarios Édgar Lemuel Torres Domaniczky y María Lila Contreras Saguier, así como también a los subarrendatarios Óscar Daniel Ruiz Fernández y María Marcela Contreras Saguier.
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Tras admitir la imputación por homicidio culposo presentada por la fiscala Carla Rojas, el juez penal de garantías Rolando Duarte convocó a todos a presentarse ante el juzgado el próximo 17 de noviembre, para la audiencia de imposición de medidas cautelares. La causa recayó en el juzgado penal de garantías N° 10, a cargo del magistrado Mirko Valinotti, actualmente interinado por Duarte.
En ocasión de presentar la imputación, la fiscala Rojas solicitó para todos la imposición de las siguientes medidas alternativas de la prisión preventiva: obligación de presentarse mensualmente ante el juzgado a su cargo; residir en un lugar determinado, debiendo comunicar inmediatamente al juzgado el cambio del mismo; prohibición de salir del país y caución real, determinada por el juzgado y/o cualquier otra medida que el juzgado considere pertinente.
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Antecedentes de la electrocución en Los Arrayanes
El 16 de setiembre de 2023, Rodolfo Antonio De Jesús “Rolo” Núñez Scolari, de 27 años, falleció durante un partido de fútbol de un torneo de exalumnos del Colegio Técnico Nacional que se realizaba en el conocido complejo deportivo Los Arrayanes, ubicado sobre la avenida Mariscal López, a dos cuadras de la Municipalidad de Asunción.
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La muerte de “Rolo” se produjo cuando el joven se apoyó en una columna para observar el partido, según se observa en videos del local. Días después, amigos del joven fallecido difundieron una serie de videos y fotografías que evidenciaron la precariedad de las instalaciones eléctricas del local.
Lo que la Fiscalía atribuye a los imputados por la muerte de Rolando Nuñez Scolari
El Ministerio Público sospecha que Édgar Lemuel Torres Domaniczky y María Lila Contreras Saguier habrían violado normas de cuidado, las que habrían asumido al firmar el contrato de arrendamiento del Complejo Arrayanes, ubicado en la Avda. Mcal. López c/ Manuel Talavera del barrio Herrera de la ciudad de Asunción, lugar que estaría siendo explotado comercialmente sin contar con licencia comercial ni planos aprobados por la Municipalidad de Asunción.
Asimismo, la Fiscalía tiene la sospecha de que Óscar Daniel Ruiz Fernández habría violado normas de cuidado, las que habría asumido como garante al firmar el contrato de arrendamiento del Complejo Arrayanes, obligándose además conjuntamente con María Marcela Contreras Saguier, a través de un contrato de sublocación, a explotarlo comercialmente en actividades deportivas y sociales, lugar que estaría siendo explotado comercialmente sin contar con licencia comercial ni planos aprobados por la Municipalidad de Asunción.
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De igual modo, Ruiz y Contreras habrían asumido mantenerlo en condiciones aptas para su uso; sin embargo, la estructura metálica de la lumínica de la cancha Nº 1 del predio no se encontraría en condiciones de aislamiento eléctrico, presentando tensión eléctrica (fuga).
El contrato de locación, de fecha 11 de octubre de 2013, entre el Parque Deportivo Arrayanes SA, firmado por María Virginia Napout, en tanto que Édgar Torres y Lila Contreras lo hicieron en representación de Pro Life SA. Entonces, Daniel Ruiz había prestado su acuerdo como garante.
Firma de sublocación entre Pro Life y Epro SA
Un contrato de sublocación fue firmado el 19 de junio de 2015 entre la firma Pro Life SA y Epro SA. María Contreras, en representación de Pro Life SA, y Óscar Ruiz, de Epro SA, suscribieron este acuerdo para la explotación del complejo deportivo.
En su imputación, la agente Rojas destaca la situación precaria en que se encontraban las instalaciones eléctricas del local intervenido, del que posteriormente se conoció que ni siquiera se encontraba habilitado, pues carecía de licencia de la Comuna capitalina.