La fiscala Patricia Sánchez formuló imputación contra el exministro de Urbanismo, Vivienda y Hábitat (MUVH) Dany Durand, por el hecho punible de estafa. Esta es una nueva causa que se abre en relación al exsecretario de Estado del gobierno de Mario Abdo Benítez, pues ya cuenta con investigaciones en su contra por el mismo hecho y asociación criminal.
De la misma forma, fueron imputados Fernando Román Fernández, Marcela Adriana Durand Martínez, Luz Marina González de Durand, Diana Teresita Britos, Flavio Arturo Britos Ocampo y María Patricia Nazareth Espínola de Durand, integrantes del directorio de las firmas Mocipar Propiedades SA, Mocipar Hogar SA; y Mocipar Automotores SA.
Lea más: Dany Durand, su esposa y su hermana, con libertad ambulatoria en otro proceso por estafa en Mocipar
La representante del Ministerio Público solicitó al juzgado penal de garantías la aplicación de medidas alternativas a la prisión preventiva, para los siete imputados, en vista de que no se observan riesgos de fuga ni de obstrucción a la investigación.
Víctima abonó por años y no recibió ningún bien
De acuerdo con el relato presentado en la imputación, en julio de 2011, Carmen Celeste Coronel Caballero, habría suscrito en Asunción el contrato N° 21311 denominado “Departamento Fácil” con Fernando Román Fernández, quien es representante de la firma Mocipar Propiedades SA.
Una de las cláusulas del contrato establecía la formación de un grupo de 5.000 adherentes, que harían anticipos a cuenta de la compra de una casa de Mocipar Propiedades SA, así como una promoción especial, a través de la cual se adjudicarían por sorteos, kits de electrodomésticos, muebles, departamentos y automóviles y otros bienes.
Lea más: Caso Mocipar: Fiscalía tiene 6 meses más para finalizar investigación a Dany Durand
Es así que Carmen Coronel habría pagado 60 cuotas de G. 155.000, por el lapso de cinco años, totalizando la suma de G. 9.300.000; pero no le fue adjudicado ningún bien. Ante esta situación, firmó un documento de “Rescisión de Contrato y Reconocimiento” por el cual se rescindía el Contrato N°5/21311 denominado “Departamento Lambaré” y se reconocía el pago hecho para su aplicación a un nuevo contrato denominado “Dúplex Nacional”.
En el marco de ese nuevo contrato, en agosto de 2016, firmó otro documento, el contrato N° 3 3256 por el que siguió abonando anticipos hasta el 14 de diciembre de 2017, fecha en que volvió a firmar un nuevo documento de Recisión de Contrato y Reconocimiento, en el cual se dejaba constancia que, supuestamente, de forma libre y voluntaria se rescindía del Contrato N° 5 33256 firmado el 26 de agosto de 2016, pero reconociendo la suma de G. 2.360.000.
Esa suma, iba a ser aplicada a un tercer contrato por el cual también abonó cuotas, la última de ellas en octubre del 2018.
Lea más: Caso Mocipar: ratifican que causas contra Dany Durand no serán acumuladas
Modalidad de engaños a través de la televisión
La contratante Carmen Coronel pagó un total de G. 11.660.000 a la firma Mocipar Propiedades SA, desde julio de 2011 hasta octubre de 2018, sin recibir ningún beneficio.
Según la hipótesis del caso de la Fiscalía, el ilícito se habría concretado así entre el 2011 y el 2018, cuando los hoy imputados, valiéndose de su rol dentro del Grupo Mocipar, recibían sumas de dinero por parte de personas como Carmen Coronel, tras haber pagado por años las cuotas y cumplido con los círculos establecidos pero no habrían recibido nada a cambio.
Es más, añade la agente fiscal, tras cumplir con la totalidad de los denominados “anticipos” señalados en los contratos y no haber sido adjudicada, habría sido inducida a firmar nuevos contratos supuestamente para no perder sus aportes anteriores.
Se presume, además, que los adherentes habrían sido captados a través del programa televisivo “Domingo en Familia”, creado, dirigido y presentado por el imputado Dany Durand, emitido a través de canales de aire paraguayos, desde 2003 al 2014, en el que se sorteaban por medio de un bolillero las adjudicaciones.
La firma de los contratos por los contratantes hacía que estos dispongan de su patrimonio, engañados con falsas promesas, por las cuales efectuaban pagos consecutivos por largos periodos de tiempo, sin obtener ninguno de los bienes promocionados y prometidos, que desembocaba al final en un perjuicio económico para los contratantes.