La ministra de Salud, María Teresa Barán, designó al Dr. Edison Florentín como director de la segunda Región Sanitaria, en medio de disputas y fuerte conflicto colorado, asume el polémico médico-político, en reemplazo de la también muy cuestionada doctora Laura Vargas.
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El designado es presidente de Seccional Colorada, esposo de la intendenta de General Resquín. En su comunidad, tomó la posta de la organización del tradicional Festival del Mbejú y no rindió cuentas de unos G. 120 millones. Su cuestionado manejo motivó la renuncia masiva de la Comisión Organizadora, y la iglesia, como parte de la organización, repudió la administración apartándose del evento.
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El médico-político, es muy a afín a los tragos y farras desenfrenadas, no tiene mucho apego a la formalidad y al trabajo, según afirman sus amistades cercanas.
El seccionalero llega al cargo apadrinado por los sampedranos colorados cartistas, el ministro de agricultura Carlos Giménez, la diputada Carmen Giménez y el diputado Jorge Barresi.
La reemplazada, Dra. Laura Vargas, trabajaba más como operadora política en los diferentes mítines y se “olvidó” del manejo institucional. Con prepotencia ordenaba a sus funcionarios a hacer campaña política en lugar de trabajar en sus puestos designados. La misma contaba con el padrinazgo del gobernador Freddy D´eclesiis y el diputado Leonardo Saiz.
La dirección de la segunda Región Sanitaria es la disputa más fuerte entre los colorados y con la nueva designación acrecienta la temprana división entre los oficialistas, que disputan liderazgo en base a la ubicación de sus leales en las jefaturas de las dependencias públicas.