Un grupo de padres de alumnos provenientes de las compañías Tambory, San Roque González y San Felipe de Santiago manifestaron que están desesperados porque el servicio de transporte escolar podría quedar suspendido si es que la EBY no realiza los desembolsos que permitan al municipio sostener el costo.
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El sostenimiento del servicio en forma compartida entre los padres y la Municipalidad es posible gracias a que cada padre paga G. 70 mil al mes. En varias ocasiones, incluso, tuvieron que hacer innumerables actividades, colaborar con sus gallinas, huevos y mandioca para recaudar los fondos, explicó uno de los afectados, que solicitó mantener en reserva su identidad.
Pero en lo que va del presente año lectivo, la administración del intendente Melchor Medina (ANR) no pagó al transportista. “Eso nos preocupa, porque existe rumor de que se estaría suspendiendo el servicio; de ser así, más de 50 estudiantes no podrán acudir a clases en el Colegio Nacional de Yacuty”, agregó.
Por su parte, Medina expresó que el servicio se presta pese a que Yacyretá no está realizando desembolsos en lo que va del 2023 y que los pagos se realizan dentro de las posibilidades con que cuenta la institución municipal.
“De acuerdo a las posibilidades de la institución se va realizando el desembolso a las comisiones, pero es imposible que la Municipalidad absorba de ingresos propios los G. 120 millones anuales. Es una carga muy pesada sostener el transporte escolar, pero seguiremos haciendo el esfuerzo por el bien de los estudiantes”, explicó.
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