Se trata de unas 20 familias indígenas. Una de las afectadas, quien se identificó como Buenaventura, comentó que anteriormente estaban viviendo en Lambaré y que de allí se trasladaron al inmueble del RC4. La comunidad indígena se encuentra allí desde comienzos del 2014, y desde entonces ha reclamado viviendas dignas.
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Buenaventura agregó que desde el Instituto Paraguayo del Indígena (Indi) no han recibido soluciones nunca y que varios políticos han pasado a hacer promesas, pero ninguno cumplió. Consultada sobre en qué ciudad han planteado vivir, dijo que no desean ir al interior del país, porque todo les sale muy caro. Por ejemplo, para trabajar y movilizarse, deben hacer un mayor gasto que si están en Asunción.
Familias indígenas urgen baños y duchas
La mujer relató que todos los niños van a las escuelas de las zonas. “Lo que más necesitamos son baños, es muy difícil para nosotros aquí, eso es lo que más pedimos, por favor”, indicó en idioma guaraní. Relató que no tienen duchas, por lo que piden a vecinos o al regimiento permiso para usar las suyas.
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Explicó que son alrededor de 20 familias de diferentes etnias, reunidas en la comunidad Teko Marangatu.