Controlar hoy enfermedades para una soja sana en la próxima zafra

Estamos en el mes de mayo y el productor agrícola ya debe empezar a prepararse para lo que será su siembra de soja en setiembre de este año. Tal vez parezca demasiado adelantado, pero el ingeniero agrónomo Sidinei Neuhaus nos explica por qué es tan importante empezar ahora lo que será la campaña de soja 2022/2023.

En la foto de la izquierda se ve el testigo sin aplicación para control de enfermedades, en la del medio, una semana después y en la de la derecha, el momento correcto.Gentileza
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–¿Cómo debe ser el manejo de los productores en cuanto a control de enfermedades para llegar a una siembra de soja en setiembre sin muchas presión de inóculos?

–Es un momento muy oportuno para iniciar el manejo de enfermedades de la soja de la próxima zafra. Un punto por donde empezar es definir la variedad de soja a sembrar en cada lote/parcela, ya que cada cultivar tiene un perfil sanitario específico (mayor tolerancia o susceptibilidad) ante las enfermedades, especialmente las manchas foliares. Otra oportunidad en este momento es por la instalación de plantas de cobertura de suelo y formación de rastrojo, que ayudará a reducir los impactos de las gotas de lluvia y la dispersión de las estructuras de resistencia de los hongos que están en el suelo/rastrojo de soja del año anterior.

–¿En qué momento el productor debe empezar con los controles?

–La próxima zafra de soja ya empezamos en ese momento, con la definición de las variedades para cada parcela, con la siembra de plantas que producen gran cantidad de rastrojo y con la definición del programa de protección (fungicidas sistémicos + fungicidas protector multisitio + biofungicida + inductor de defensas) más ajustado a cada caso.

–Este año la roya volvió a presentarse con cierta fuerza. ¿Esa roya presente puede llegar a la soja de setiembre?

Sí. La roya es una enfermedad que necesita de un hospedero vivo para sobrevivir, o sea, las esporas no sobreviven en el suelo, por ejemplo. De esa forma, si hay plantas de soja vivas y con desarrollo de roya durante los próximos meses, la enfermedad seguirá su desarrollo y liberando esporas al aire, que pueden ser el inicio de las infecciones de la soja de la siguiente zafra. Desde septiembre (2023), con la siembra de la nueva zafra, con esporas de roya disponibles y condiciones ambientales favorables para la infección y el desarrollo de la enfermedad, son los tres puntos del “triángulo de la enfermedad”, luego la roya ya se estaría desarrollando en el nuevo cultivo.

–¿De qué otras enfermedades debe cuidarse el productor apuntando a la soja de setiembre 2023?

En las condiciones de ambiente de cultivo de soja de Paraguay, la soja puede desarrollar varias otras enfermedades de gran importancia; la cercospora (principalmente la Cercospora kikuchii), la septoria (Septoria glicini) son enfermedades muy frecuentes y causan daños en la gran mayoría de los cultivares. Aparte, también encontramos la mancha-anillada (Corynespora cassicola), más frecuente en algunos cultivares y en la región centro norte (Alto Paraná norte, Canindeyú) y la antracnosis (Colletotrichum truncatum), encontrada en algunos cultivares susceptibles a la enfermedad y principalmente en años más húmedos. En las tres zafras que la presión de roya fue menor en Paraguay (2019/2020, 2020/2021 y 2021/2022) los ensayos de manejo de manchas foliares mostraron respuestas de rendimiento de hasta 550 kg/ha cuando comparado con manejo con fungicidas, o sea, las aplicaciones de fungicidas para manejo de manchas foliares arrojó en menor pérdida de productividad en 10% a 15%.

–¿Qué principios activos se recomiendan utilizar para el control de estos problemas?

En Paraguay tenemos disponible muy buena oferta de productos para el manejo de las enfermedades, desde los fungicidas sistémicos de varios grupos químicos (Triazoles, Estrobilurinas, Carboxamidas, Morfolinas), aparte de los fungicidas protectores multisitios (Mancozeb, Clorotalonil y los Cupricos, a base de cobre), más recientemente están llegando biofungicidas (fungicidas biológicos) y ya contamos con tecnologías de inductores de defensas de las plantas (como si fueran vacunas), que ayudan la soja a defenderse de los hongos.

–¿Cómo se debe preparar el productor?

–El punto clave es preparar un programa de aplicaciones (secuencia de productos/mezclas) acorde a cada cultivar, fecha de siembra y ubicación de la parcela de cultivo. Con posibles ajustes del programa de aplicaciones, según las condiciones climáticas en el trascurso de la zafra.

Lo cierto es que hay un mejor producto/mezcla para cada momento del ciclo de la soja, según la enfermedad que debe ser manejada en ese momento (eso depende del cultivar sembrado, localidad de la parcela y las condiciones ambientales, principalmente). No hay una regla única y fija para todos los casos.

Más recientemente están llegando herramientas digitales, con uso de algoritmos y de inteligencia artificial, que ayudan el productor y los ingenieros agrónomos a correlacionar todos esos factores y definir el mejor manejo para cada caso. Es el caso de la DigiFarmz, entre otras más ya disponibles.

–¿Los rastrojos pueden ser hospederos de inóculos de enfermedades para una próxima campaña?

–Las manchas foliares (septoriose, antracnosis, cercospora, mancha-anillada) son enfermedades que pueden sobrevivir en rastrojo de su hospedero (la soja, en este caso) por más de 12 meses, o sea, el rastrojo de la soja que fue cosechada en febrero llevará inóculos para la próxima soja, que será sembrada en el siguiente mes de octubre (8 meses después). El manejo principal ahí es la rotación de cultivos (soja en verano y otro cultivo no hospedero de la enfermedad en el verano siguiente, por ejemplo el maíz de zafra, logrando así cortar el ciclo del inóculo.

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