Varios vecinos del barrio Nuevo San Blas, quienes ocuparon hace poco la zona al ser trasladados del Regimiento de Caballería 4, Parque Caballero y de las vías del tren en Barrio Jara, se manifestaron ante la falta de agua, luz, la sobrefacturación de la ANDE y la mala calidad de las casas.
“Hay familias que no tienen aire, placa, que se manejan con gas y les viene la factura con un monto de G 400 mil, G 600 mil, una familia le vino G 900 mil, que no tiene absolutamente nada, tiene un ventilador, una tele. Por el otro lado, hay familias que tienen muchas cosas y les viene G 5 mil, G 2.400, G 2.700, o sea hablamos de una irregularidad en la facturación de la ANDE”, denunció Liz Echeverría.
Contó que varios vecinos fueron reubicados hace cuestión de dos meses, y en el lugar cuentan con un tanque de agua que fue preparado para la construcción de las viviendas, pero no para las personas que vivirían en el lugar. “Somos 600 familias, 3.000 personas, no tenemos agua”, refirió.
Lea más: Más promesas de levantar viviendas en expredio del IPS
Recalcó que ya fueron a hacer los reclamos a la ANDE, obteniendo como respuesta que deben “racionar el consumo”. “¿Cómo vamos a racionar? Acá hay gente recicladora, que vende remedios yuyo, empanadas para poder vivir acá”, cuestionó.
Incompatibilidad entre caños del barrio con los de ESSAP
Ariel Bordón, uno de los vecinos del lugar, contó que tras su reunión con representantes de la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (ESSAP), le respondieron que los caños de la zona no están preparados para el raudal que envían desde la estatal, ya que el mismo podría reventar los caños de las casas instalados.
“Le dijimos si es que podíamos solicitar los medidores para que coloquen y nos respondieron que va a ser imposible, porque no hay compatibilidad entre los caños que colocaron acá, con los caños de la ESSAP, que si ellos nos mandan ese raudal de agua, van a reventar los caños. Tienen que cambiar toda la cañería, esto es un chiste. Una vez que la constructura se retire del proyecto, ESSAP va a cerar el agua, eso nos explicaron”, acotó.
Por su parte, Rocio Escurra, culpo a los responsables del Ministerio de Urbanismo, Vivienda y Hábitar (MUVH) de no prever esta situación, lo que denota una descordinación entre las instituciones públicas. “No hicieron una reunión con la ESSAP para pedir los medidores, no trabajan en conjunto, necesitamos que el ministro de la vivienda de la cara”, aseveró.
Lea más: En julio se iniciarán obras del barrio San Blas
María Dávalos, otra de las vecinas, dijo que las casas se hicieron mal, considerando que cuando llovió, el agua inundó las casas. “Es algo inhumano como estamos. A mi me vino en 6 días una factura de G 400 mil. A mi, según ellos (ANDE), el 30 de enero yo ya estaba acá. Yo me mudé recién el 19 de febrero. Después de 15 días recién me colocaron el medidor y, según su sistema, figura un consumo de G 400 mil en 6 días, lo cual es imposible, si yo trabajo, no estoy en mi casa”, lamentó.