Grupos de estudiantes provenientes de diferentes puntos de la comunidad santarroseña reclamaron a Rubén Jaquet la puesta en servicio del transporte universitario perteneciente a la institución municipal, pero que se encuentra fuera de servicio desde hace varios años por desperfecto mecánico.
El reclamo obedece a que en esta comunidad existen poco más de 220 estudiantes de diferentes carreras, y tienen que trasladarse hasta la ciudad de San Ignacio para poder estudiar. El inconveniente está en que solamente cuentan con el servicio de tres colectivos, dos financiados por la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) y otro por la Gobernación de Misiones.
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El número de estudiantes que tienen que usufructuar el servicio sobrepasa la capacidad de los buses que operan en la ciudad, según explicaron. Por ese motivo es necesario contar con más colectivos porque los conductores no pueden alzar a todos, eso hace que los jóvenes tengan que desplazarse en motocicletas y retornar en horas de la noche desde San Ignacio hasta Santa Rosa.
Los manifestantes señalaron que la Municipalidad local cuenta con un bus universitario que fue adquirido por la administración del exintendente Arnaldo Valdez (PLRA). El vehículo hace tres años, aproximadamente, se encuentra sobre tacos en el Departamento de Transporte Municipal.
El intendente Rubén Jaquet (PLRA), al ser consultado sobre el reclamo de los estudiantes, señaló que teniendo en cuenta el número de universitarios que van hasta la ciudad de San Ignacio para estudiar, su administración en forma conjunta con la Gobernación de Misiones solicitó a Yacyretá para que se les pueda ayudar con un colectivo más a fin de cubrir la gran demanda que tiene el municipio.
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Esta medida se debe a que el bus universitario municipal con capacidad de 25 pasajeros ya se encuentra en desuso, dijo. Añadió que la administración anterior había adquirido de segunda mano hace varios años por lo que ya no está en condiciones para ser utilizado. Actualmente se está viendo la posibilidad de enviar a remate, explicó.
También señaló que su administración no compró otro colectivo porque priorizó la compra de maquinaria agrícola para poder apoyar al sector productivo, teniendo en cuenta que Santa Rosa es un distrito agrícola. Esto requirió una inversión aproximada de G. 1.900 millones, según dijo.
“Gracias a esa inversión Santa Rosa pudo terminar a tiempo la preparación de suelo para los pequeños productores. Eso permitió que ya pudieran cultivar en tiempo y forma los productos para su consumo”, agregó.