El funcionario fallecido fue identificado como Hugo César Villalba Cañete, de 53 años de edad, quien se desempeñaba como ujier en el Juzgado Civil del 22 Turno, Secretaría 44, según informaron desde el Poder Judicial.
Se sospecha que el hombre sufrió un paro cardíaco, por lo cual tuvo que ser asistido por paramédicos, pero ya no hubo posibilidad de salvarlo.
Según contó Armando Figari, secretario del juzgado en donde el funcionario prestaba servicios, el infarto se produjo alrededor de las 9:00, tras lo cual habrían llegado funcionarios de enfermería del Poder Judicial, pero de todas maneras se solicitó el servicio de ambulancia externo.
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Funcionarios reclaman por falta de infraestructura adecuada
Una funcionaria judicial de nombre Dahiana Sanabria expresó su indignación a través de las redes debido a que “no había médicos, no había ambulancia, no había balón de oxígeno, esperaron que fallezca para sacarlo, la ambulancia no tenía las herramientas necesarias, una hora estuvo tirado en el suelo porque no podían sacarle de ahí”, aseguró.
Sanabria agregó que “nos dimos cuenta con mis compañeros que la Corte es responsable de que una persona fallezca en su lugar de trabajo, por su negligencia”.
La funcionaria criticó el hecho de que “una entidad tan grande como la Corte Suprema de Justicia, que tiene más de 3.000 funcionarios, no esté en condiciones como para afrontar este tipo de situaciones”.
Y continuó su relato asegurando: “Acá vamos a morir y nadie va a hacer nada. ¿Qué hacen los ministros? ¿Por qué hay médicos de turno que son traumatólogos? ¿Dónde están las rampas o el ascensor preparado para bajar una camilla?”.
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Ambulancia tardó 35 minutos en llegar
El periodista de ABC Color Carlos Ortega confirmó en comunicación con ABC Cardinal AM que la ambulancia tardó más de 35 minutos en llegar, dato proporcionado por la seguridad del Palacio de Justicia.
El infarto se habría dado a las 8:35 de la mañana y cinco minutos después se habría dado la llamada al servicio de ambulancias SEME, que llegó pasadas las 9:10 de la mañana. Mientras esta llegaba, la atención del ahora fallecido estuvo a cargo de funcionarios internos del Poder Judicial.
La clínica del Poder Judicial
Investigaciones del diario ABC Color habían denunciado ya en 2018 que “toda una clínica, que incluye nutricionistas y salas de fisioterapia, funciona en el Poder Judicial. Su existencia se ‘maquilla’ en las planillas de sueldos, donde la mayoría figura con cargos administrativos. Solo en salarios para profesionales de blanco, esto cuesta G. 1.505.141.400 anuales al Estado.
La investigación de los periodistas Mariana Ladaga y Julio Benítez demostró que “en total, el departamento médico del Poder Judicial tiene más de 30 funcionarios, o sea, podría tratarse de una clínica, pero la mitad del plantel está ‘maquillada’ en la planilla de salarios”. Entre las cosas más llamativas, habían demostrado que “todos los médicos trabajan una vez a la semana, de 07:00 a 13:00 o de 13:00 a 18:00.
Entre los funcionarios figuraba “Laura Bordenave Gamarra, nuera del ministro de la Corte Luis María Benítez Riera. Ella está en el departamento de kinesiología, según su legajo. Una investigación de ABC Color había develado que entre enero de 2014 y marzo de 2018, ella cobró su salario de G. 4.538.935 sin ir a trabajar, mientras hacía su especialización en reumatología en una universidad de México”.
Diesel pidió informe al respecto
Desde la jefatura de prensa de la Corte Suprema de Justicia aseguraron que el presidente César Diesel ya solicitó informes al Secretario de Consejo de Superintendencia, que expida todos los pormenores de lo que sucedió hoy y así conocer los datos del departamento médico para saber quién estuvo y qué fue lo que sucedió.
Aseguraron que una vez que se tengan esos datos los darían a conocer a la ciudadanía a través de los medios de prensa.