El suboficial segundo José Luis Cristaldo (29) fue detenido por sus colegas de la Comisaría Santa Librada de Villarrica, tras haber protagonizado un incidente en que disparó su arma de fuego contra la humanidad de su pareja sentimental, identificada como Mirna Dávalos Portillo (28). Aparentemente, los problemas se iniciaron con una fuerte discusión entre ambos y el agente policial, quien luego dio positivo al alcotest, sacó su arma de fuego y disparó contra la mujer.
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Según el informe policial, redactado por sus propios colegas de la mencionada dependencia policial, el disparo del arma de fuego se habría producido de manera “accidental”; sin embargo, la víctima declaró ante la Fiscalía que ambos habían mantenido una discusión de pareja y, en ese ínterin, Cristaldo, le había pedido que lo acompañe a salir, pero ella se negó porque estaba con su hija menor, momento en que el uniformado sacó su arma de fuego y disparó, según Dávalos Portillo.
Después del grave hecho, el propio uniformado dio aviso a la Policía Nacional, que tomó intervención y junto con bomberos voluntarios trasladaron a la víctima hasta el Hospital Regional de la capital guaireña.
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Una vez se dio conocimiento del hecho, la agente fiscal de turno, María Agustina Unger, tomó intervención y se trasladó hasta el centro asistencial, donde tomó la declaración a la víctima.
“Me constituí en el Hospital Regional para hablar con la víctima y ella manifiesta que el uniformado José Luis Cristaldo llegó a bordo de su vehículo hasta la vivienda de la misma, insistiendo en que ella salga a conversar con él. Después de conversar, él le solicitó que lo acompañe a salir y la víctima se niega porque su hija estaba con ella; en ese momento, según el relato de la víctima, José Luis toma el arma y dispara”, relató la fiscala.
El informe médico indica que la bala impactó en la pelvis de la víctima, generando un orificio de entrada y salida, a causa de lo cual tendrá que someterse a una intervención quirúrgica y necesitará platino.
“Ante todos estos elementos que se pudieron recolectar en forma primaria, estamos ante un hecho punible grave, lo cual conlleva a una pena privativa de libertad de 10 años. La carátula ya se estableció como una lesión grave, atendiendo al daño que sufrió la víctima, y vamos a presentar imputación y pedir la prisión preventiva”, anunció Unger.
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Del poder del efectivo policial se incautó una pistola Glock calibre 9 milímetros con un cargador con capacidad de 16 tiros y 12 cartuchos sin percutir que tenía en el interior de su vehículo Toyota tipo Vitz. El hombre dio positivo con 0,700 mg/l al alcotest.