El símbolo en cuestión se encuentra grabado en la parte posterior del cuello de la estatua, y representa dos escuadras enfrentadas. La presencia de la escuadra, una de las imágenes que identifica a la masonería, provocó comentarios desafortunados difundidos por internet.
La estatua representa al primer santo paraguayo, San Roque González de Santa Cruz, misionero de la congregación Compañía de Jesús (jesuita, quien en 1.615 fundó la misión Nuestra Señora de la Encarnación, que daría origen a la actual ciudad de Encarnación.
El monumento es parte integrante de dos esculturas de igual dimensión que fueron donadas a la ciudad por la Fundación. La otra escultura, actualmente en construcción, representa al cacique Ytapúa, quien sería el jefe de una comunidad guaraní asentada en la zona durante aquella época.
Ambas esculturas, San Roque y el Cacique Ytapúa, este último estará ubicado en el acceso a la ciudad a través de la ruta PY 06, fueron ofrecidas en donación a la Junta Municipal, y aceptadas por ambas instancias del gobierno de la ciudad.
La recepción de la primera obra terminada se realizó en el marco de un acto oficial organizado por la Municipalidad local, el pasado 23 de diciembre. En la ocasión, el intendente Luis Yd (Alianza), destacó que la figura de San Roque está conectada “a nuestra historia más profunda”, y su testimonio de vida “nos inspira”.
La monumental escultura, tanto por su tamaño, con siete metros de alto -es la estatua más alta del mundo con la imagen de San Roque- como por su calidad artística, se suma a los atractivos paisajísticos de la ciudad, destacó.
Comunicado de la diócesis
A través de un comunicado dirigido a los fieles católicos, difundido el 23 de diciembre pasado, el obispo de la diócesis de Encarnación, monseñor Francisco Javier Pistilli Scorzara, deslindó responsabilidad de la iglesia con la construcción del monumento, y aclaró que la estatua “no se trata de una imagen de devoción”.
“La Diócesis no ha participado en la decisión, tampoco en la gestión del artista. Se agradece la memoria del Fundador, que recupera algo de la memoria de la ciudad. No se trata de una imagen de devoción”, sostiene la autoridad religiosa.
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Asimismo, aclara que el obispo no está en conocimiento del símbolo “que parece estar ubicado en la parte posterior del cuello de la estatua. Corresponde al artista explicar su significado y la razón de haberlo colocado”, afirma.
El obispo Pistilli no asistió al acto oficial de recepción que organizó la Municipalidad, la noche del viernes 23 de diciembre, debido a un compromiso previo en la Parroquia de la Santa Cruz, de Coronel Bogado, según refiere en el comunicado.
Recordó el obispo que la diócesis de Encarnación tiene un proyecto pendiente de un oratorio dedicado a San Roque González de Santa Cruz, “con una finalidad sacra y de culto cristiano”, al mismo tiempo como memoria histórica abierta a la evangelización del presente. El proyecto de oratorio está ubicado en un terreno cedido en comodato por la Municipalidad a la iglesia, en un sector sobre la avenida costanera en un punto de la desparecida “zona baja” de la ciudad.
Firma del artista
Respecto a la polémica, el autor, Orlando González, sostuvo que el símbolo ubicado en la estatua es su firma, y que no tiene ninguna otra intencionalidad oculta ni nada por el estilo, sino simplemente, como artista, dejar su marca personal en su obra.
Esa imagen que se difundió por las redes sociales y desató la polémica porque supuestamente “se descubrió” un símbolo instalado, fue tomada de mi perfil. Fui yo quien tomó esa foto y la puse en mi perfil, sostuvo.
González dijo que no le molesta la polémica, y que incluso le parece interesante que se discuta sobre la obra. No es un símbolo masón, el masónico lleva una letra G. Todas mis obras llevan mi firma, y por lo general, le coloco una imagen de la herramienta que más emplee en la construcción, sostuvo.
Esta es una obra en cuyo diseño se estudiaron todos los detalles, desde el reflejo del sol sobre en el rostro, la mirada, la sombra que se proyecta sobre los rasgos, todos son detalles que hacen a una obra de arte, señaló.
Mencionó el autor que luego de que se generó la polémica le llamaron desde la diócesis y le pidieron que fuera a explicar el sentido del símbolo. No me pareció pertinente ni necesario, es mi firma de autor, que llevan todas mis obras, señaló.