Esta mañana obreros procedieron a destruir de manera controlada las estructuras de la gran fuente de agua situada en la Plaza Juan de Salazar, en el centro de Asunción. El ministro de la Secretaría Nacional de Cultura (SNC), Rubén Capdevilla, informó que las obras son parte de los trabajos de restauración del conjunto de plazas históricas ubicadas frente al Cabildo.
“El objetivo es recuperar el diseño clásico y dejarlas en óptimas condiciones para el disfrute de la ciudadanía. Intervienen la Secretaría Nacional de Cultura, el Ministerio de Obras Públicas y la Municipalidad de Asunción”, indicó el Capdevilla.
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La plaza no tenía originalmente esa gran fuente de agua, sino amplios camineros. No obstante, el problema principal es que la fuente fue abandonada por las autoridades de turno a lo largo de los años, por lo que se convirtió en un feo criadero de mosquitos.
Fuente de agua tenía casi 20 años
Cuando la ciudad celebró sus 466 años, el entonces intendente Enrique Riera (ANR) inauguró la fuente de agua, en el 2003. “Revitalizará el entorno con varios chorros y luces de colores que ofrecerán un espectáculo cada noche”, era el anuncio de la inauguración.
Según archivo de ABC, la capacidad de la fuente era de 190.000 litros, incluidos los dos reservorios subterráneos. Contaba con cuatro chorros altos, dos coronas y cuatro géisers que se intercalaban automáticamente con las luces de colores.
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Fue una de las tres fuentes inauguradas en ese entonces. Las otras dos eran la situada en la Plaza Juan E. O’Leary y la que se encontraba en la Plaza de los Héroes, esta última, donación del Rotary Club.
En una foto de setiembre del 2009 ya se puede ver cómo las aguas se encontraban sucias. Los niños nadaban en la improvisada “piscina”. “Mientras los pequeños disfrutaban de la actividad, algunos adultos que pasaban por el sitio se mostraron preocupados por los peligros a los que se exponía la salud de los menores en las aguas evidentemente sucias”, dicta una publicación de la fecha, en nuestro diario.