El censo fue sin duda el tema de la semana. Cuestionado por donde se lo mire, el titular del Instituto Nacional de Estadística (INE), Iván Ojeda, estuvo en ABC AM 730.
Lea más: Censo 2022: “Una decepción más del Gobierno”, dice diputado Maidana
Citó algunas excusas principalmente de jóvenes que al final no asistieron y generaron inconvenientes de llegar a todas las casas que se fijaron como meta. Habló de dos motivos puntuales.
El primero guarda relación con el tema dinero. Ojeda admitió que muchos alegaron que el viático de G. 100.000 era poco, por lo que pretendían cobrar más. Ante esta dificultad, el vocero mencionó que iba a ser difícil cumplir porque el presupuesto programado no contemplaba elevar la suma a más de ese monto por cada censista.
Luego se presentó el factor académico y la ocasión que tuvieron muchos de estar libre ese día. El miércoles último se decretó feriado nacional, y esto fue aprovechado por muchos que en vez de participar como censistas, decidieron quedarse en casa a estudiar.
Lea más: INE dice que usó hasta ahora US$ 18 millones y prosigue con recuperación
Por ninguna razón Ojeda lanzó juicios de valor por estas dos causas. Teniendo en cuenta que quizá el dinero fijado no llenaba las expectativas y como varios de los censistas están en plena carrera universitaria, un día libre era ideal para ampliar sus conocimientos, teniendo en cuenta aparentemente los exámenes finales.
Las principales deserciones se dieron en Asunción y Central, refirió.
Se optó por el papel antes que por un sistema de APP
Consultado de las circunstancias que llevaron a decidir que el censo se haga netamente con papel, Ojeda respondió que da “mayor seguridad”. Argumentó que si se le daba a los voluntarios tablets, se tenía que invertir más de US$ 200 millones de presupuesto.
También indicó que el uso de una aplicación puede generar sus costos. Agregó que si se iban casa por casa con un aparato celular el problema de conectividad en algunas zonas representaría otra traba al censo.
Incluso analizó que si los celulares no tenían la memoria o capacidad de almacenar datos podrían generarse más problemas al ya complicado censo.
Por último reiteró que siguen con el proceso de censar a los pendientes y que en siete meses se tendrán los primeros resultados. “La brecha de recuperación no es tan complicada”, señaló.
Lea más: Censo 2022: en qué y cómo se gastaron parte de los US$ 43 millones