Desde hace varios días la Asociación de Cañicultores de Mauricio José Troche, Guairá, se manifiestan con cierre intermitente de la Ruta PY02 en la altura del cruce denominado San Pedro que une Troche con Coronel Oviedo, Caaguazú, como medida de protesta en contra de las autoridades de la alcoholera estatal Petropar por la ineficiencia del funcionamiento de la antigua fábrica y por el nulo avance de la construcción del nuevo tren de molienda por el cual ya se desembolsó US$ 6.000.000 de los US$ 28.000.000 que costará.
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Tras las diversas manifestaciones, el ahora expresidente de Petropar Denis Lichi renunció a su cargo con el argumento de que se dedicará a pleno a la actividad política y en su reemplazo fue nombrado Pedro Román Renna, quien este viernes se constituyó a la planta alcoholera en Troche y posteriormente mantuvo una reunión con los cañicultores en el lugar de la manifestación.
“Finalmente llegamos a un acuerdo con el actual presidente Román, quien se comprometió en apurar a la empresa encargada de la obra para que se lleve adelante la construcción del nuevo tren de molienda. La fábrica actual ya está obsoleta, trabajamos a pérdida, por eso necesitamos una fábrica nueva”, explicó el presidente de los cañicultores de Troche, Édgar Ortiz.
Asimismo, indicó que, a partir del acuerdo pactado, levantaron de forma inmediata la manifestación y anunció que a partir de esta misma tarde se volverá a ingresar la caña dulce para el funcionamiento del ingenio.
“Una vez que hicimos el acuerdo, inmediatamente levantamos la medida de fuerza y esta misma tarde vamos a meter nuestra caña para la molienda y continuar con la zafra”, recalcó Ortiz.
Corte administrativo
El recientemente nombrado presidente de Petropar, Pedro Román, indicó que desde la fecha procedieron a realizar el corte administrativo para que oficialmente pueda ocupar el sillón que dejó Denis Lichi. También realizó un recorrido por las instalaciones de la planta alcoholera asentada en Mauricio José Troche, donde también debe construirse el nuevo tren de molienda exigida por los cañicultores.
“Hoy estamos con un proceso de corte administrativo y documental, recibiendo todo lo que es la parte administrativa de la empresa y asumiendo la responsabilidad de llevar esto con transparencia. Recorrimos por la planta, mirando las inversiones, las obras y los trabajos que se están haciendo, nos estamos interiorizando de lo que se está haciendo o falta hacer”, señaló Román.
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“El grueso está en Brasil”
Con relación al nulo avance en la construcción de la nueva fábrica, el titular de la alcoholera alegó que las obras no se ven actualmente porque las primeras inversiones fueron para la compra de las piezas que deben ensamblarse en el ingenio.
“El grueso está en Brasil, porque ahí están las fábricas de las piezas principales, lo que se puede verificar acá a simple vista es el trabajo de suelo y demás que se realiza, la parte de obras civiles y mecánicas que se realiza se puede observar con normalidad. Igualmente, nosotros pedimos informes a la empresa encargada sobre la fabricación de las piezas, esperaremos sus reportes para ver qué acciones tomar”, puntualizó el titular de Petropar.
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Se pagaron US$ 6.000.000 y no se ven avances
La construcción del nuevo tren de molienda está a cargo de la empresa Estructura Ingeniería SA (EISA) representada por el señor Felipe Nery Huerta, que en febrero pasado ya recibió unos US$ 6.000.000 en dos pagos por parte de Petropar como anticipo del 20% del monto total de la obra; sin embargo, hasta la fecha solo se observa mejoramiento del suelo en el lugar.
Este viernes se pudo observar varias máquinas pesadas en la zona de obras realizando el mejoramiento y carga de suelo, después de siete meses de haber recibido la transferencia de dinero, para posteriormente iniciar con los trabajos estructurales.