En silencio, el Consejo de Administración del IPS aprobó la semana pasada una decisión con la que salvó a la firma Eurotec SA, propiedad del clan Ferreira, de una posible sanción por haber incumplido un millonario contrato para la provisión de equipos e insumos para el servicio de hemodiálisis del hospital central de la previsional.
La máxima autoridad de la previsional aprobó en su sesión de la semana pasada la recisión de mutuo acuerdo del contrato, con lo que no se podrá ejecutar la póliza ni solicitar a la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP) una nueva sanción a la firma.
Eurotec SA es propiedad de Justo Ferreira, Roque Dagogliano y Carlos Borrel. Es una de las dos empresas del clan Ferreira que protagonizaron el escándalo de los insumos chinos que debían ser entregados al Ministerio de Salud Pública en los primeros meses de pandemia, en marzo de 2020.
Eurotec e Insumos Médicos SA (Imedic SA) son las dos firmas sancionadas con prohibición de contratar con el estado por tres años como consecuencia del escándalo de los insumos de pésima calidad. Esta fue la mayor sanción registrada hasta el momento para empresas proveedoras del Estado. Aun así, ambas siguen gozando de tratos especiales por parte de las autoridades del Ministerio de Salud Pública y también del IPS.
Delicado servicio
El IPS entregó en 2020 un contrato de G. 32.000 millones para la adquisición de insumos para equipos de hemodiálisis para su Hospital Central.
El llamado figura bajo el ID 366476 y la adquisición es en carácter de comodato. En su momento, la Dirección de Contrataciones Públicas decidió abrir la investigación y suspender el proceso luego de sucesivas protestas.
Sin embargo, la previsional decidió seguir con el proceso.
El Consejo de Administración del IPS decidió adjudicar a dos firmas: Eurotec SA, propiedad del clan Ferreira; y al Consorcio Douglas Renal, conformado por las empresas CHACO I Industrial y Comercial SA y Laboratorios Douglas SA, representado por Claudio Escobar.
La adjudicación a Eurotec SA fue por G. 19.881 millones y al Consorcio Douglas Renal por G. 13.254 millones.
Casualmente, ambas empresas ofertaron los mismos productos, todos ellos con registro sanitario a nombre de firmas pertenecientes al clan Ferreira.
Mala calidad
Un archivo remitido por funcionarios del servicio de hemodiálisis revela que los incumplimientos por parte de Eurotec SA se iniciaron ya en 2020. La situación empeoró el año pasado, de acuerdo a los reclamos del personal de blanco de la institución.
El 28 de junio de 2021, desde el servicio de Nefrología remitió una nota en la que señalaron la “llamativa cantidad de tapas de bidones de los concentrados Ácido y Bicarbonato de la marca INPRASOL que vienen averiadas dentro de las cajas cerradas”.
Además, relatan que se podía verificar de forma constante la cristalización de los reactivos dentro de los bidones y hasta en las mismas cajas. Esto es sinónimo de falencias de calidad de los delicados productos.
En esa misma nota señalan que ya habían conversado verbalmente sobre esta situación con Óscar León, uno de los representantes de la empresa.
Equipos descompuestos y personal sin capacitar
Otro archivo que forma parte del expediente revela la pésima calidad de los equipos que fueron entregados por el clan Ferreira al IPS.
“Llama la atención que para ser equipos relativamente nuevos, con poco uso, hemos llegado a tener el 50% de ellos descompuestos”, afirma una nota remitida por el Servicio de Nefrología a representantes de Eurotec.
“La calidad de los equipos NO es buena”, agrega líneas más abajo y sostiene que el personal encargado de la asistencia técnica y mantenimiento de los mismos no cuenta con la debida capacitación que se requiere para dar respuestas a las necesidades de la previsional, precisamente en un área muy delicada.
Dos intentos para ayudarlos
Como si toda la situación no fuera lo suficientemente grave, ahora se suma que lejos de rescindir el contrato con la cuestionada firma, el IPS pretende dar una nueva ayuda a Eurotec SA. Y ya fue la segunda oportunidad en la que se pretende favorecer a la sancionada empresa. Entre ambos intentos hubo apenas un mes de diferencia.
La empresa presentó una solicitud de adenda al Consejo de Administración para cambiar los productos que tienen que entregar.
En cualquier otra situación, la institución ya hubiera solicitado la rescisión atendiendo los constantes incumplimientos, más aún en un servicio tan delicado como el de hemodiálisis.
Versiones del personal de blanco del IPS señalan que, en la práctica, Eurotec SA lleva meses entregando otras marcas que no son las que figuran en el contrato firmado con la previsional.
Los médicos ponen en duda que los equipos hayan recibido el mantenimiento necesario.
Gerente retiró
De acuerdo con fuentes de la previsional, fue el propio gerente de Salud, Jorge Batista, el que presentó el segundo pedido de aceptar la adenda planteada por el clan Ferreira.
Fue Batista quien retiró por segunda vez el plan, alegando que debería leer más detalladamente el expediente. Mientras, Batista sigue sin recomendar al Consejo que se ejecute la póliza que debería proteger a la previsional y sus asegurados.
La póliza está vigente hasta 2025 y pese a los incumplimientos, no se intenta asegurar los fondos de la entidad.
Para poder ejecutar la póliza, el IPS debería haber rescindido de forma unilateral el contrato, alegando los incumplimientos sucesivos. Con esto además se habría podido elevar una protesta ante Contrataciones Públicas para solicitar una nueva sanción contra Eurotec SA. Todo esto fue dejado de lado por las autoridades de la previsional al recurrir a una recisión de mutuo acuerdo.