Con frases que van desde el “soy trabajador, estoy trabajando” de los motociclistas que suben a las veredas hasta el “no hay cebra pintada” de los conductores, todo se usa para justificar la prepotencia en las calles.
Otro ejemplo de la normalización es la respuesta “si no te gusta andá quejate a la municipalidad” que lanza un chofer de una imprenta ubicada sobre 15 de Agosto y Manduvirá. Sus directivos permiten que los conductores laven sus móviles bloqueado completamente la acera cuando padres intentan llevar a sus hijos a las escuelas cercanas.
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Por su parte, en Barrio Obrero pululan los talleres mecánicos y las viviendas particulares que utilizan las veredas como estacionamiento.
Peatones consultados en la zona señalan que lo correcto es evitar caer en el vandalismo (rayar autos, romper vidrios) y constantemente denuncian estos casos a los números de la PMT en donde solo reciben promesas de intervenciones que nunca llegan.
En cambio -ahora- la Dirección de Tránsito de la Comuna se jacta de operativos de liberación de aceras en diversos barrios desde sus redes sociales. Los comentarios de los internautas en su mayoría son críticos, un grupo defiende a los motociclistas “trabajadores” y otro condena que no hay operativos en sus respectivos barrios.
El artículo 59 de la Ordenanza de Tránsito de Asunción prohíbe a los vehículos estacionar en las aceras, ya que solo podrán cruzar la vereda para entrar o salir de inmuebles.
La norma señala que las aceras quedarán, en general, reservadas para uso de los peatones, de animales domésticos, medios de locomoción con capacidades diferentes, coches de niños, rodados propulsados por menores de 10 (diez) años.