El procedimiento fue realizado durante esta madrugada, en un puerto clandestino denominado Bambú, en la jurisdicción de Camino Tres, área rural del distrito de Salto del Guairá, a unos 40 kilómetros de la ciudad. Dicho embarcadero está sobre la margen derecha del Lago de Itaipú. Fueron contabilizados 2.551 cajas de cigarrillos, de las marcas Eight, R7, Gift Box, entre otros, además de varias cajas que contenían piezas de aeromodelismo, cubiertas y otras mercancías, que ya estaban siendo cargados en tres embarcaciones de gran porte para ser transportados al lado brasileño.
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Los intervinientes lograron incautar, además de los productos para el contrabando, 5 camiones de distintos portes, 4 camionetas y tres embarcaciones, según lo informado por el departamento de comunicación de la Armada. En horas de la mañana, durante un sobrevuelo en helicóptero que realizaron Emilio Fuster, ministro anticontrabando, y el almirante Carlos Velázquez, comandante de la Armada Paraguaya, específicamente en la zona de Puerto Tigre, encontraron más de 8 embarcaciones, presumiblemente propiedad de los contrabandistas que también fueron incautadas.
Todos los elementos de la logística (camiones, barcos y camionetas), como los productos incautados fueron derivados hasta la sede del Área Naval Canindeyú, con asiento en Salto del Guairá, donde deberá ser contabilizado con la presencia de la fiscala anticontrabando Nilsa Torales. Según el comandante de la Armada Paraguaya, más de 30 personas habrían huido del lugar, al percatarse de la intervención.
No se va a robar
El comandante Velázquez señaló que todo lo incautado en esta ocasión será diligentemente inventariado y luego se pondrá bajo seguro resguardo, en coordinación con la fiscalía y la Aduana, teniendo en cuenta que mercancías electrónicas por cerca de un millón de dólares, incautados en anteriores procedimientos, desaparecieron de un depósito que estaba bajo resguardo de la Aduana local y la Policía. Hasta ahora la fiscalía no tiene mayores novedades sobre el destino de la valiosa carga.
Se presume que las mismas, consistentes en aparatos de Play Station, teléfonos Iphone, entre otros, fueron entregados. Sin embargo, para simular el robo se abrió un boquete en la parte trasera del depósito donde fueron guardadas dichas evidencias. De acuerdo con los datos y los antecedentes, los intervinientes presuntamente se hacen de costosos aparatos y productos electrónicos durante las intervenciones, especialmente nocturnas como la de esta ocasión. Normalmente nadie reclama ya que sus dueños prefieren perder sus mercancías, al estar operando en forma irregular. También la fiscala Nilsa Torales aseguró que con las mercancías se asegurará la cadena de custodia.