El avance de los tres centros penitenciarios que están siendo construidos en Emboscada (2) y Minga Guasú (1), es de más del 90%, según indicó esta mañana el ministro de Justicia, Edgar Olmedo, quien presentó un informe sobre la construcción al Ejecutivo.
“El avance es de más del 90%, por lo que las obras se entregarían entre finales de mayo y la primera quincena de junio, luego se requerirá US$ 1.500.000 para equipamiento. La intención es que uno de ellos entre en funcionamiento en el segundo semestre de este año”, manifestó Olmedo.
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En cuanto al financiamiento para el equipamiento que se necesitará, el ministro dijo que se podría dar a través una ampliación presupuestaria para el Ministerio de Justicia que permita hacer los llamados respectivos para cocina, lavandería, administración y las celdas. “También se podría recurrir a la cooperación de binacionales como Itaipú”, sostuvo.
Estos penales de alta seguridad cuentan con 3.960 plazas, es decir, que cada centro penitenciario tendría la capacidad para albergar a 1.330 personas aproximadamente, según explicó el ministro. La capacidad de Población Penal sería cercana a los 3.900 internos.
El objetivo es la reinserción social
Olmedo señaló que el objetivo principal de estas nuevas cárceles es el de la reinserción, y que serán trasladados allí las personas privadas de libertad que ya están condenadas.
“Habrá un proceso de diferenciación de aquellos privados de libertad con condena, de aquellos que están en proceso y el objetivo es trasladar a todos los condenados a las mismas para llevar a cabo un proceso real de readaptación y la posterior reinserción de los mismos a la sociedad. En principio, los criterios de traslado serían los que tienen condenas firmes y que estén en algún programa se reinserción”, sostuvo.
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“Esto será para quienes realmente quieran readaptarse, porque obtendrán formación educativa, alfabetización de adultos, educación media y la formación técnica para darle la posibilidad de formarse en algún tipo de profesión de mando medio que les permita reinsertarse”, explicó.
Finalmente, el ministro anunció que objetivo a largo plazo es inhabilitar el penal de Tacumbú, teniendo en cuenta la situación edilicia, y que se encuentra en una zona urbana. Dijo que el edificio podría convertirse en un museo o una oficina del Ministerio Público más adelante. También anunció que se tiene prevista la construcción de un penal exclusivamente para mujeres.