Desde el 2019, las autoridades de la Escuela Básica Nº 2959 Mbokajaty Sur vienen solicitando la reparación del tejado y pilares, que sostiene las cuatro aulas del pabellón que actualmente se encuentran clausuradas debido al peligro de derrumbe. La situación afecta a más de 451 alumnos, que junto a sus maestros dan clases a diario a la intemperie. De esta manera, según manifiestan los docentes, difícilmente se pueda desarrollar en un ambiente pedagógico el desarrollo curricular del Ministerio de Educación y Ciencias.
Cansada de solicitar sin obtener respuesta, la directora Victorina Ovelar denunció la situación junto a varios padres de familia y al director del Sindicato Nacional de Directores, Miguel Marecos. “Esta situación es muy preocupante. Imagínense que los alumnos estén desarrollando clases y que el techo caiga sobre ellos. Por esta situación no debe pasar ningún niño más en el país”, manifestó la directora.
A la postura de la dirección de la institución se unieron los padres de familia, que mostraron las condiciones en que los niños y niñas desarrollan las clases. “Los tejuelones a simple vista se ve cómo están cediendo. Fue por eso que entre todos los padres y la directora decidimos que nuestros niños salgan afuera”, lamentó Ruth Careaga, miembro de la Asociación de Cooperadora Escolar de la Escuela.
Los niños, por su parte, a vuelta de su receso, y percatados de la presencia de esta corresponsalía en la institución no dudaron en aprovechar la oportunidad de las luces de la cámara que registra la llegada del receso para pedir a gritos “queremos nuestra aula”. En medio de la inocencia, y conscientes de que están dando clases al aire libre, a diferencia de los demás alumnos, no dudaron en manifestar sus necesidades.
Según comentaron los padres, el intendente Horacio Fernández vive a tres cuadras de la institución. Para saber acerca de la situación de la institución en cuanto al pedido que ingresa vía microplanificación nos comunicamos vía mensajería de WhatsApp y llamada, pero el contacto no pudo efectivizarse.
El pedido de refacción, según dijo la directora, actualmente se encuentra en proceso de licitación, lo que implicará que los alumnos probablemente este año no puedan disponer de un espacio para el desarrollo de las clases.