El experto citó que somos un país con vasta energía limpia, hidroeléctrica, que ni siquiera genera dióxido de carbono al encender un foco. Teniendo en cuenta esos factores, deberíamos ser un país extremadamente desarrollado.
Sin embargo, Itaipú hoy día tiene una tarifa que nos cuesta relativamente cara. Ahora bien, considerando que en setiembre de este año se termina de pagar la deuda, el costo de producción caerá un 60%.
Hoy día, refirió el experto, si compramos el bloque entero de energía, la tarifa nos estaría costando en torno a 33 dólares el megavatio/hora. Al terminar de pagar la deuda, eso se reducirá a cerca de 12,5 el megavatio/ hora, costo de producción Itaipú.
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Tendríamos que ver reducción reflejada en la factura
Por lo tanto, explicó el ingeniero, tenemos dos caminos, uno de ellos es energía barata para todos los paraguayos. Centrándonos en este punto, si el costo se reduce 60% después de 50 años, “algo tenemos que ver reflejado en nuestra factura”. “Eso te dice el sentido común”, reflexionó el especialista.
Cristaldo refirió que el costo de producción de 12 o 13 dólares el megavatio/hora no existe en ningún otro lugar del mundo.
“Eso significa que nosotros los paraguayos, nuestras industrias y comercios deberían ser los más competitivos del mundo en términos de energía; la energía eléctrica hoy es la madre de todos los recursos”, resaltó Cristaldo.
Según destacó el ingeniero, lo que pasará en Paraguay cuando se termine de pagar la deuda no solo será un hito histórico, sino que “a nivel mundial tenemos que tomar esta oportunidad única, hoy que todavía tenemos vasta cantidad de energía, y utilizarla para nuestro desarrollo”, recomendó.
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“Debería ser política de Estado”
En este punto fue preguntado sobre los vehículos eléctricos, a lo que respondió que “absolutamente”, deberíamos tener estos medios de transporte en la ciudad, de manera de mejorar nuestra calidad de vida.
El experto sostuvo que si bien es muy conveniente mover los vehículos con energía eléctrica, y de hecho debería ser una política de Estado, el problema aún es el costo de los mismos.
Ahora bien, más allá del costo de los vehículos eléctricos, un gran “ancla” para desarrollar este país es la ANDE.
“Hoy día tenemos uno de los peores sistemas eléctricos de toda Latinoamérica. Somos uno de los tres únicos países en Sudamérica que no tienen un órgano regulador del sector eléctrico”, criticó el ingeniero.
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“Monopolio estatal deficiente”
Lamentó que en la actualidad tenemos “un monopolio estatal deficiente donde se derrochan millones de dólares en pérdidas que rondan el 28% en promedio”.
Agregó que la ANDE es “una empresa en banca rota que tiene que invertir cerca de US$ 1.500 millones al año en infraestructura, y solo tiene capacidad de invertir US$ 300 millones”.
Aseveró que esta empresa “se tuvo que haber desmonopolizado y posiblemente privatizado 25 años atrás; en términos de apertura del mercado de energía tenemos 35 años de atraso en las reformas”. “No existe un sistema eléctrico tan pobre como el nuestro”, lamentó.
“Aquí en Paraguay la ANDE es juez y parte, puede sobrefacturar. En cualquier otro país se iba a multar a la empresa grandemente para que nunca más sobrefacture a ningún cliente”, opinó.
Mercado de energía competitivo
Refirió que con la energía que tenemos disponible, deberíamos estar trasladándonos en vehículos eléctricos, con un mercado de energía competitivo no solamente nacional sino regional. “Toda nuestra energía excedente deberíamos estar vendiendo a precio de mercado a nuestros vecinos”, aseguró.