Este sábado 26 de febrero se conmemoran 110 años de la muerte del general Bernardino Caballero, y para los apasionados por la historia es un buen momento para recordar a este referente político desde el inicio de la triple alianza hasta su fallecimiento en el año 1912.
De la mano del historiador Fabián Chamorro, rememoramos algunos hechos puntuales de la vida de este paraguayo que marcó un hito en la historia. Uno de los nombres más utilizados por los grupos políticos para apelar a la buena imagen de sus ideas, ocultarlas, o justificarlas, aunque no siempre lo nombran de buena fe... ¿Quién fue realmente el hombre detrás del mito del general Bernardino Caballero?
El historiador lamentó que el discurso político actual “utiliza la figura de Caballero sin entenderlo, ya desde la época de Alfredo Stroessner. Lo nombran por nombrarlo porque es el fundador del Partido Colorado, pero no entienden la dimensión de su legado”, expresó Fabián Chamorro.
El hombre más que el mito
El contexto histórico dado por el historiador se dio a propósito de la publicación de un nuevo libro que escribió el historiador junto a Saúl Zaputovich. El material titulado Bernardino Caballero: El gran iniciado, relata toda la vida del general, con un capítulo especial que habla de su vida en la masonería, institución a la que perteneció desde el fin de la guerra de la triple alianza hasta su muerte.
Chamorro mencionó que en esta nueva construcción histórica que presentan sobre el general Caballero, dejan un poco a un lado la parte política y hablan del hombre.
Resaltó que Caballero fue el principal referente de la reconstrucción nacional. “Más allá de sus errores que son varios, se habla del estadista y del político”, dijo.
Los comienzos de la corrupción
Recordó que el general tuvo 10 años de mucha inestabilidad, anarquía y corrupción, donde la postguerra de la triple alianza “hizo que aparezcan los grandes negociados desde el gobierno”. “Eso ya no se acabó nunca”, citó.
Si bien hubo algunos periodos presidenciales “más rescatables, la corrupción ya se instaló desde entonces”, dijo Chamorro.
En otro momento, relató que el general no terminó la secundaria porque la guerra comenzó y ya no tuvo tiempo.
Además, en esa época la escolarización era diferente, porque no estaba establecida la edad para comenzar la escuela, y “podías empezar el primer grado a los 14 años”, ejemplificó.
Rodeado de mentes brillantes
No obstante, pese a no tener estudios, Caballero supo rodearse de hombres mucho más brillantes que él.
“Al volver de la guerra, con su participación guerrera hace que los veteranos lo rodeen y estos personajes brillantes lo ayudaron a gobernar y a hacer política. Gobernó hasta 1886, pero participó de todas las decisiones políticas del Paraguay hasta el año 1904, cuando cae el Partido Colorado y sube el Liberal”, relató Chamorro.
Aún después, en su etapa de exilio, el general se siguió rodeando de jóvenes intelectuales brillantes, y supo darle el espacio a gente mucho más preparada que él.
Comandante de Acosta Ñu
Bajo su comando, una legión de heridos convalecientes, adolescentes y niños pelearon en Acosta Ñú. Caballero tenía solo 30 años cuando peleó en Acosta Ñu y dirigió la batalla, preparando las tres líneas de defensa en aquel fatídico combate de agosto de 1869.
Así, logró evacuar a más de 1.000 paraguayos de ese lugar, aunque nuestro país pagó un precio de demasiados muertos, debido a que en aquella batalla pelearon más civiles que militares.
Cuando lo llevaron preso a Río de Janeiro, estuvo prisionero durante 7 meses, desde fines de abril de 1870 hasta noviembre de ese año.
Aunque, según aclaró Chamorro, Bernardino y los más de 400 oficiales paraguayos que fueron presos a Río de Janeiro no fueron realmente prisioneros, sino que tenían sueldo y eran bien tratados. Esto, según el historiador, los brasileños lo hacían con el objetivo de convencer a los compatriotas de ser pro Brasil.
Pero, posteriormente esta política cambió, “porque los brasileños y argentinos se dieron cuenta que al paraguayo no hacia falta llenarle de regalos, sino que era mas fácil y más barato sobornarlo”, sostuvo Fabián Chamorro.
Ocupó cargos estratégicos
Una vez que Caballero regresó de Brasil, su primer cargo fue el de comandante de las Fuerzas Armadas, en el año 1871.
Después se convirtió en ministro de Guerra y Marina por varios periodos, y fue presidente desde 1880. “Tenía que haber una sucesión presidencial, pero Caballero hace un golpe de estado y toma el poder”, relata el historiador.
Recién en 1882, a través de una elección se convierte en presidente por cuatro años más. Se mantiene en el mando hasta 1886 y a partir de allí se va sucediendo la búsqueda de espacios políticos. “Eso hace que se creen los dos partidos políticos tradicionales un año después. En 1887 se crean la Asociación Nacional Republicana y también el Centro Democrático, que hoy se llama Partido Liberal. A partir de ahí empieza el bipartidismo paraguayo”, destacó el historiador.
Se estima que tuvo unos 100 hijos
El libro recoge recoge además datos interesantes como la cantidad de hijos que tuvo Caballero, quien reconoció a 39 hijos de los cuales 13 eran de una misma mujer en la ciudad de Villarrica. “Probablemente haya tenido muchísimos más. Estaríamos alcanzando 100 sin ningún problema”, refirió Chamorro.
Los autores Fabián Chamorro y Saúl Zaputovich presentarán su libro Bernardino Caballero: El gran iniciado, este sábado 26 de febrero (mismo día del aniversario de la muerte del general Caballero) a las 11:00 en la Academia Paraguaya de la Historia (Andrés Barbero y Avenida Artigas) a una cuadra de la entrada al Parque Caballero, lugar donde murió el general.