Fatiga, cansancio y dolor de cabeza son los síntomas persistentes más frecuentes después de haber finalizado el periodo de aislamiento por covid-19 en aquellos que tuvieron un cuadro leve de la enfermedad.
La falta de aire también es frecuente, pudiendo ser ocasionalmente grave en el caso de haber sido un paciente que pasó por la internación.
Asimismo, también se cuenta como síntomas que pueden perdurar la debilidad muscular, mareo, palpitaciones, tos, dolor de pecho, pérdida del olfato o del gusto, febrícula, dolor de garganta, pérdida de la concentración entre otros.
“Pasado un periodo de cuatro semanas, se considera que es un covid prolongado o persistente. A veces los síntomas tras una fase aguda, incluso pueden ir más allá de las 12 semanas. Sin embargo, las secuelas postcovid se ven únicamente en aquellos pacientes que tuvieron una enfermedad severa, es decir, entre aquellos que estuvieron internados en terapia intensiva por el daño estructural que hubo debido a las complicaciones”, explicó a ABC la Prof. Dra. Mabel Peralta, Coordinadora Postgrado de Neumología FCM-UNA.
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Mencionó que estos pacientes, al salir de su internación en UTI ya tienen las indicaciones de a qué especialista recurrir para su posterior tratamiento.
No obstante, aquellos que tuvieron un cuadro leve, deben acudir a un médico tratante dependiendo del síntoma que perdura.
“Vemos actualmente muchos pacientes con covid prolongado en el cual los síntomas respiratorios son fluctuantes y en algunos casos incluso incapacitantes”, advirtió.
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Covid persistente
Según la Dra. Peralta, se considera que un paciente padece de covid persistente cuando los síntomas del virus perduran pasadas las cuatro semanas.
“Muchas veces en estos casos al evaluar al paciente no se encuentra algún daño específico, pero en base a la evaluación vemos que es debido al virus. El covid prolongado se ve más frecuentemente en mujeres de edad media”, explicó.
La especialista dijo además, que para el tratamiento post-covid aplicado principalmente a aquellos que salieron de terapia intensiva, no hay un consenso absoluto en el manejo del paciente, pero se sugiere seguir diferentes protocolos de acuerdo a las secuelas que quedan. “Cada persona tiene un tratamiento diferente”, aseguró.
La Dr. Peralta mencionó además que un paciente que padece covid-19 se ve afectado también en la parte psicológica.
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“Muchos por la ansiedad recurren a la automedicación, a realizarse por cuenta propia una tomografía, irradiandose sin necesidad”, advirtió.
La especialista recomendó evitar este tipo de acciones, principalmente no recurrir a la automedicación con antibióticos.