El juez de Garantías Mirko Valinotti volvió a convocar a la odontóloga Sandra Marcela Obertino Leguizamón y al técnico anestesista Adrián Cayetano García Servín, quienes no se presentaron el 30 de diciembre último para la audiencia de imposición de medidas y sus defensas justificaron las ausencias con certificados médicos de reposo.
Obertino Leguizamón y García fueron imputados por el fiscal fiscal Aldo Cantero por los ilícitos homicidio doloso y por comercialización de medicamentos no autorizados, y el agente del Ministerio Público solicitó al Juzgado de Garantías que decrete la prisión preventiva de ambos.
Incluso, Cantero anunció que la imputación podría ser ampliada por estafa en el caso de la odontóloga y por “planillerismo” en el caso del anestesista, quien es funcionario del Instituto de Previsión Social y al momento de la presunta mala praxis que derivó en la muerte de la niña de 9 años debía estar trabajando en la previsional, pero se encontraban en la clínica privada.
La presente causa penal se inició en torno a un hecho ocurrido el pasado 12 de noviembre de este año, en la clínica odontológica “Mommy Dent”, situada en Loma Pytã, Asunción, que no estaba habilitada por el Ministerio de Salud Pública para su funcionamiento.
Según la imputación, a las 7:30 del 12 de noviembre llegó la niña de 9 años, acompañada de sus padres, a la clínica para ser sometida a un tratamiento de conducto que le realizaría Obertino Leguizamón. La pequeña tuvo dos consultas anteriormente, el 15 y el 20 de octubre, respectivamente.
Lea más: Odontóloga y anestesista procesados suspenden audiencia con reposo médico
La madre abonó por el tratamiento la suma de G. 3.350.000 a la odontóloga, quien estuvo a cargo del procedimiento dental. También participaron el anestesista, quien puso a dormir a la niña administrándole sedantes y anestesia.
Sin embargo, tras culminar el tratamiento la menor de edad ya no habría despertado, produciéndose su muerte por un paro cardiorrespiratorio secundario a un shock anafiláctico, a las 11:00, según la imputación fiscal.
Lea más: Clínica odontológica no estaba habilitada por el Ministerio de Salud
Un día después del hecho, una comitiva fiscal y policial allanó la clínica, donde de uno de los basureros se levantó una ampolla vacía y otra rota de la marca “Quinfa”, con la inscripción “Fornitil” y de uso exclusivo del Instituto de Previsión Social, que presumiblemente fueron usados por los profesionales.
En su declaración testimonial ante el Ministerio Público la madre señaló que encontró a la doctora Sandra Obertino a través de la red social Facebook.