Según las denuncias de los familiares y vecinos, a más de las investigaciones llevadas a cabo por el fiscal Eduardo Román, la docente Carolina Aguayo ingresó caminando jovialmente alrededor de las 13:30 a la clínica Santa Ana, que está ubicada a unos 20 metros de su casa. La víctima debía someterse a una intervención quirúrgica a raíz de algunos problemas ginecológicos.
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Es más, cuando se estaba preparando para la intervención hasta alzó algunos autorretratos en sus redes sociales. Pero, aparentemente, en el momento en que le aplicaron la anestesia, la paciente comenzó a convulsionar. Los médicos que la atendían se vieron obligados a salir de la clínica y buscar los elementos para reanimarla y luego derivarla al Hospital Regional de Calle’i, San Lorenzo, donde ya había llegado con muerte cerebral, según denunciaron.
Finalmente, 24 horas después la docente expiró y el forense de turno confirmó que falleció a causa de una falla multiorgánica. Ahora la fiscalía deber averiguar qué causó estas fallas múltiples, señalaron las fuentes.
En tanto que los investigadores señalaron que la clínica Santa Ana está habilitada en el Ministerio de Salud; sin embargo, no está registrada en la Superintendencia de Salud.