Se trata de la abogada Fanny Leticia Arévalos Casola y su hijo Carlos Raúl Antonio Arévalos Casola, quienes fueron imputados por la presunta producción mediata de documentos públicos de contenido falso y uso de documentos públicos de contenido falso.
Así también, el suboficial inspector Gustavo Fabián Flores Godoy, por la supuesta producción inmediata de documentos públicos de contenido falso. Este prestaba servicios en la comisaría 2ª Asunción, pero desde el 14 de abril de de 2020 cumplió funciones en la comisaría 23ª Asunción, y actualmente presta servicio en la comisaría 8° de Asunción.
Todo esto en el marco de la causa abierta por la fiscala Rosa Heinroth, de la Unidad Penal N° 1 de la Fiscalía Barrial N° 3, luego de una denuncia presentada por Julio César Olmedo Cabrera el pasado 11 de setiembre de 2020.
Investigación derivó de otro caso
De acuerdo con los datos, Carlos Arévalos Casola había denunciado en enero de 2019 por un hecho punible a Julio Olmedo, caso que llevó el fiscal Giovanni Grisetti. Sin embargo, el mismo agente del Ministerio Público desestimó la denuncia contra Olmedo en noviembre de 2019 ante el juzgado penal de garantías N° 1 de Clara Ruiz Díaz.
La jueza hizo lugar al pedido a través del Auto Interlocutorio (A.I.) Nº 398, después la decisión fue notificada a las partes vía WhatsApp el 23 de junio de 2020. Sin embargo, Arévalos Casola presentó apelación, firmada por su madre Leticia Arévalos, en la cual afirmaron que no fueron notificados porque el teléfono en el que debían recibir el mensaje se extravió el 22 de junio.
Junto con el documento de apelación presentaron un acta de denuncia de la comisaría 2ª Asunción, en la que se denuncia el extravío del aparato. La misma fue redactada y firmada por el suboficial inspector Gustavo Fabián Flores Godoy, fechada en 22 de junio de 2020.
Sin embargo, a través de averiguaciones y mediante la nota DAP Nº 122/2020 del 01 de setiembre del 2020, remitida por la Dirección de Gestión del Personal, se constató que Flores Godoy prestaba servicios ya en la comisaría 23ª Asunción, a partir del 14 de abril de 2020.
También, en el marco de la misma causa, por Nota Nº 426/2020 del 09 de octubre del 2020, se solicitó informe a la comisaría 2ª de Asunción, a modo de tener certeza si Carlos Arévalos denunció el extravío de su teléfono en dicha dependencia el 22 de junio de 2020. La Policía informó el 20 de octubre de 2020 que no se registraban denuncias por esa persona en esa fecha.
Ante las sospechas de que el escrito policial presumiblemente apócrifo fue utilizado en el incidente de nulidad y recurso de apelación general es que la fiscala Rosa Heinroth abrió una investigación en el Ministerio Público y formuló imputación.
Acusado de plantar evidencia
El Ministerio Público había anunciado, en 2019, una investigación al suboficial inspector Gustavo Fabián Flores Godoy, ante las sospechas de que el mismo, cuando prestaba servicios en la comisaría 2ª, le había plantado un cuchillo a Lucas Daniel Cañete Silva, quien fue apresado en julio de 2017 por el robo de un par de championes.
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Durante el juicio oral a Lucas Cañete, una testigo manifestó que el agente policial la obligó a mentir en sus declaraciones iniciales, en las que hacía referencia al uso de un cuchillo, para que el ladrón sea procesado por robo agravado y no por robo simple.
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Finalmente, el joven ladrón fue condenado a 3 años y medio de cárcel por el tribunal de sentencia conformado por los jueces Elio Rubén Ovelar, Víctor Hugo Alfieri y María Luz Martínez.
En 2016, Gustavo Fabián Flores Godoy fue incluido en un grupo de 60 uniformados sumariados por cuestionable conducta y hechos de corrupción.