El tope del 32,68% para los créditos del sistema es levemente inferior al que está vigente para este mes, de 33,26%, según el reporte técnico.
Los topes para tasas consideradas usurarias en el sistema regulado vienen bajando sostenidamente desde 2015 y aún se encuentran en niveles históricamente bajos, según datos oficiales. No obstante, la tasa activa promedio que se cobra en el sistema está muy por debajo del techo permitido, alrededor del 12,32%, de acuerdo con el último informe de indicadores financieros.
Los productos con tasas más altas generalmente son los destinados al consumo personal y sobregiro, mientras que la tarjeta de crédito pasó a ser uno de los instrumentos más ventajosos en cuanto a costos. Según los registros históricos del sistema, en 2014 la tasa usuraria se ubicó en 57,13%, para bajar al 50% en 2015 y 42% en 2016 y así sucesivamente. Esta fuerte caída en los límites de la usura se dio principalmente desde la vigencia (setiembre de 2015) de la Ley que topeo los intereses de tarjetas de crédito. Las tasas que sobrepasen estos límites serán consideradas usurarias y penalizadas según lo establecido por las normas vigentes.