En la tarde del domingo, una comitiva fiscal-policial encabezada por la agente del Ministerio Público Sandra Ledesma y el jefe de Homicidios de la Policía Nacional, comisario Hugo Grance, se trasladó hasta la vivienda donde fueron asesinados el filántropo alemán Bernard Raymond Von Bredow y su hija Lorena Lydia Von Bredow (14). Ambos fueron hallados sin vida y con rastros de violencia el 22 de octubre pasado en su casa de la compañía Patiño de Itauguá.
“Se dio la apertura de la caja fuerte que estaba en uno de los contenedores. Se encontraron algunos violines de colección, joyas, objetos arsenales del fallecido, piezas de mamut y documentos importantes, que van a ser objeto de estudios”, explicó a la prensa el comisario Hugo Grance, durante el procedimiento realizado.
“La mayoría de los documentos hallados son antiguos y escritos en idioma alemán. Eso hay que traducir y remitir al laboratorio donde correspondan para su análisis”, refirió el jefe policial. La caja fuerte se encontraba dentro de un mueble bastante grueso y tuvieron que recurrir a técnicas especiales para abrirla, según explicó Grance.
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Las evidencias quedarán bajo resguardo del Ministerio Público y luego serán remitidos a los laboratorios.
Detenidos e imputados
Hasta el momento los investigadores del caso detuvieron a tres ciudadanos alemanes como principales sospechosos del atroz doble asesinato.
Se trata de Volker Grannass (58) quien está procesado como el principal autor material, mientras que Yves Asriel Spartacus Steinmetz (60) y Stephen Jorg Messing Darchinger (51) fueron detenidos en carácter de cómplices. Todos ellos están imputados por la Fiscalía por el delito de homicidio doloso.
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De acuerdo a las pesquisas, el doble asesinato apunta como móvil del hecho al supuesto robo de cuatro violines Stradivarius, un histórico instrumento musical que puede valer hasta US$ 16 millones cada uno.
Debido a su alto valor, los instrumentos musicales necesitan de un certificado de autenticidad, que el filántropo habría tenido en su casa y que los ladrones necesitaban para poder venderlos.