Ataque con sello de la mafia en San Juan Nepomuceno

SAN JUAN NEPOMUCENO. Rociaron con balas de diferentes calibres el local de un minimercado, propiedad de un poblador con dudoso actuar de la compañía San Carlos de este distrito. En el ataque, perpetrado por hombres enmascarados, resultó con heridas leves un guardia de seguridad.

El comercio que fue atacado por supuestos sicarios en la compañía San Carlos.abc color
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Según los datos proporcionados por el jefe de la comisaría de San Carlos, Magno Brizuela, el comercio atacado ubicado en el barrio San Marcos pertenece a Dionisio Ferreira Villalba, alias Kavaju Hu. El hombre vive en el lugar y en el momento del ataque se encontraba descansando.

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Durante el ataque resultó con heridas superficiales Juan Bautista Rivas Casco, guardia de seguridad, quien fue auxiliado y trasladado por vecinos hasta el hospital distrital de esta ciudad, donde fue atendido del refilón que recibió a la altura de la boca.

El informe policial señala además que los atacantes, quienes actuaron con pasamontañas, utilizaron armas de grueso calibre, largas y cortas, como 9 mm, escopeta calibre 12 y M16. Los hombres, que presumiblemente fueron 5 ó 6, se movilizaban en una camioneta que sería una Ford Ranger de color plateado. No se pudo determinar la cantidad de disparos realizados por los supuestos malvivientes, pero se presume que serían como 20 ó 30.

El suboficial superior Magno Brizuela informó además que los antecedentes fueron remitidos al fiscal de turno, José Núñez. Los efectivos policiales de Investigación de Hechos Punibles y Criminalística del departamento de Caazapá están trabajando para dilucidar el hecho.

Según los datos recabados, Dionisio Ferreira Villalba cuenta con antecedentes por un tema ambiental y también es señalado de estar involucrado en diferentes negocios oscuros, especialmente en temas de tráfico de rollos y abigeato. Con relación a un proceso por delito ambiental del año pasado, fue condenado a dos años de cárcel, pero con suspensión condicional. Según trascendidos, el ataque no sería por cuestiones ambientales ni abigeatos, sino por un negocio ilícito de mayor envergadura.

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