El ahora procesado por tráfico internacional de drogas y asociación criminal, Miguel Ángel Servín, fue detenido el sábado último en la zona de Villa Morra, en Asunción, durante un operativo en conjunto realizado por el Ministerio Público, la Unidad de Inteligencia Sensible (SIU) y la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad).
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Junto con Servín fue apresada su actual pareja Bruna Regina Martina Morais, mientras que en otros puntos de la capital y Centralfueron detenidos María Silvia Lezcano Monges, Elvio María Vega Chaparro y Francis Marcelo Rojas Benítez, en tanto que en Amambay fueron arrestadas Liz Katherine Lailla Villalba y Marol Lizet Servín Lailla, esposa e hija de Servín, respectivamente, .
Todas estas personas fueron imputadas por la fiscala Elva Cáceres por los hechos punibles de lavado de dinero y asociación criminal.
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Los 2.906 kilogramos de cocaína fueron encontrados entre el 19 y el 20 de octubre del año pasado, en un puerto privado de Villeta, mimetizados entre carbón vegetal y que debían salir con destino a Bélgica. El primer detenido en este caso fue Cristian César Turrini.
El papel de cada uno de los procesados
Dentro de toda esta red indagada aún queda por ser detenido Hugo Antonio Meza Huespe, quien es marido de María Silvia Lezcano Monges. El prófugo era el responsable de lavar el dinero que obtenía la red a través de sus actividades en el narcotráfico, ayudado por su pareja.
De acuerdo con la investigación hecha por la Senad y el Ministerio Público, el líder de la banda es Miguel Ángel Servín, quien daba instrucciones precisas a Cristian César Turrini Ayala, quien estaba encargado de organizar y coordinar los envíos de cargamentos de carbón contaminados con cocaína.
Dentro de la estructura Turrini trabajaba en asociación con Alberto Ayala Jacquet, dueño de Carbosur.
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De esta forma cuando la mercadería que puede ser soja, chía o carbón, que por lo general tiene canal verde en Aduanas para su salida, y la misma está contaminada con droga se produce el tráfico vía marítima. En este caso de los 2.906 kilos, el destino era Bélgica y de ahí a Israel.
En cuanto al lavado dentro de esta organización narco, encabeza Hugo Meza como administrador y propietario de la playa de autos “HA Automotores”, empresas de fachadas para la realización de préstamos, usura y empeños, con ayuda de su pareja Silvia Lezcano, de profesión abogada, quien es la que facilitó sus datos para la compra de bienes e inmuebles con dinero del tráfico.
Dentro de la misma red de lavado también aparecen Aníbal Ramón Insfrán, personal de seguridad y secretario de confianza, Elvio María Vega Chamorro, y también estaban insertas en esta parte la pareja actual del capo Bruna Regina Martins, la esposa del mismo Liz Lailla Villalba y la hija, Marol Lizet Servín Lailla.