Uno de los trabajos principales para la modernización del sistema de distribución es el cambio de conductores desnudos por protegidos para mejorar la prestación de su servicio. Hasta finales de setiembre, la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) ya instaló 798 km de líneas de media tensión con conductores protegidos, el 80% de la meta que se propuso para este año”, informa la empresa eléctrica estatal.
Agrega que esta cifra supera el récord del 2020, año en que se sustituyeron 593 km de líneas de media tensión, mejorando así los índices de calidad de servicio en un 25% con relación al año pasado. “Esto es gracias a que este tipo de líneas minimizan las interrupciones por cortocircuito, especialmente por el contacto eventual con ramas de árboles; es por ello que se utilizan en las zonas urbanas, en donde generalmente se presentan gran concentración de árboles cercanos a las líneas de distribución”, puntualiza.
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En ese sentido, indica que la meta para este 2021 es la instalación de 1.000 km de líneas de media tensión con conductores protegidos, a través de una inversión aproximada de US$ 62.000.000,, financiadas con fondos propios, de entidades multilaterales y recursos provenientes de Itaipú Binacional, para compra de materiales y la ejecución de la instalación de las mismas, añade.
“De esta manera, la ANDE sigue ejecutando obras para el aumento de la calidad del suministro de energía eléctrica a fin de brindar a los clientes un servicio acorde a las exigencias actuales”, indica la institución.