“La Administración de Cumplimiento de Leyes sobre las Drogas (DEA, por su sigla en inglés) investigó al líder de Honor Colorado, Horacio Cartes, por supuesto caso de lavado de dinero generado a través de medios ilícitos, incluyendo venta de narcóticos a EE.UU.”, publicó el diario ABC Color en su edición impresa del 29 de octubre de 2011.
Diez días después, el 9 de noviembre, se registraba Dominicana Acquisition SA en Panamá a nombre del político colorado y sus tres hijos.
La información hacía referencia a un cable diplomático dado a conocer por WikiLeaks y que data del 5 de enero del 2010.
El documento se originó en Buenos Aires, fue enviado a Lima, Nueva York, Panamá, Washington DC, Virginia, pero no llegó a la sede diplomática de Estados Unidos en Asunción.
El cable hace referencia a la relación entre la DEA, y la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF, por su sigla en inglés) y el plan de integrar la “Operación Corazón de Piedra”.
La operación “Corazón de Piedra” es una investigación transnacional coordinada, concentrada en la interrupción y el desmantelamiento de una importante empresa de tráfico de drogas y lavado de dinero que opera dentro del área de la Triple Frontera (TBA) de Argentina, Brasil y Paraguay, y en otras partes alrededor del mundo.
“Esta investigación ha establecido lazos desde y entre tráfico de drogas, lavado de dinero y otras organizaciones criminales y, como tal, ha sido aprobada como una investigación de Objetivo Organizacional Prioritario Consolidado (CPOT) designada durante abril de 2009″ señalaba el cable diplomático divulgado por WikiLeaks.
El lavado de dinero, según EE.UU.
Siempre según el documento, a través de una fuente cooperativa de la DEA BACO (oficina de la DEA en Buenos Aires) y otros efectivos encubiertos de la DEA, agentes se infiltraron en una empresa de Cartes, que “se cree lava grandes cantidades de la moneda estadounidense generadas a través de medios ilícitos, incluyendo la venta de narcóticos desde la TBA (Triple Frontera) a los Estados Unidos”.