En la acusación presentada el 13 de setiembre de 2019, refiere que no hay ninguna duda de que el diputado por Alto Paraná y aspirante a la intendencia de Ciudad del Este, Ulises Quintana, era miembro de la banda criminal liderada por Reinaldo “Cucho” Cabaña.
La fiscalía explica que la conducta del parlamentario se encuadra en lo establecido en el artículo 42 de la ley 1340/88 (antidrogas).
Refiere el Ministerio Público que el 28 de agosto de 2018, Quintana, a pedido de “Cucho” envió a Carlos Aguilar y José Alarcón hasta la comisaría de Nueva Londres, en donde fue demorado Diego Medina (secretario de Cabaña), cuando transportaba US$ 190 mil en su vehículo. “Ulises, a través de los teléfonos de sus enviados mantuvo conversación con la oficial primero Selva Chaparro, quien luego dispuso negociar con Medina para su liberación, previo pago de sumas de dinero en concepto de coima”, según la fiscalía.
Agrega que Ulises integró el grupo criminal con absoluto conocimiento, ya que en su relación con el líder “Cucho” Cabaña, sabía perfectamente la actividad ilícita que le generaba dinero.
La expectativa de pena en la asociación criminal es de 5 a 15 años de cárcel.
Lavado de dinero
Para el Ministerio Público Ulises también cometió lavado dinero previsto en el artículo 196 del Código Penal. En ese sentido, refiere la acusación que el legislador tenía consigo una camioneta marca Toyota , modelo Land Cruiser, propiedad de Cabaña, la cual no solo utilizó durante el tiempo que duró su campaña para diputado, sino una vez que accedió al cargo, igual dispuso del vehículo para movilizarse.
“El acusado tenía el disfrute del bien adquirido por Cabaña a través de capitales provenientes del narcotráfico”, señala la fiscalía y agrega que “no existen dudas de que Ulises sabía el origen del bien utilizado ya que era parte de la organización criminal”.