“Después de 18 meses, hoy en el día de la primavera recibimos una nueva esperanza, una ilusión porque muchos alberdeños que han quebrado comenzarán de nuevo”, dijo Miguel Vázquez.
El 1 de octubre se habilitarán los pasos terrestres a Argentina, luego de un año y medio de cierre debido a la pandemia de covid-19.
“Alberdi, Pilar y otras localidades de Ñeembucú no tienen puente, por lo que se va esperar un poquito más, pero ya con mucha esperanza por el anuncio oficial del gobierno argentino”, dijo Vázquez.
En Alberdi unas 1.000 casas comerciales quebraron y 3.000 personas quedaron desempleadas. Todas esas personas, y aproximadamente otras 6.000 que trabajaban en forma indirecta, tienen la ilusión de poder trabajar nuevamente con la apertura de la frontera.
“En su totalidad, están sumergidos en deudas, las posibilidades de acceder a créditos están cerradas, porque las empresas que dan créditos nos les dan a raíz de que no cuentan con la capacidad de pagar los préstamos”, comentó Vázquez.
Agregó que hay que explicarle al presidente Mario Abdo Benítez que “no es lo mismo sobrevivir que empezar de nuevo”.
“Necesitamos que el Gobierno (...) de alguna forma gestione créditos suficientes para que comerciantes vuelvan a comprar mercaderías e iniciar las transacciones comerciales que saben hacer y realizaron durante los últimos 50 años”, dijo.
“La plata que entra en una ciudad de frontera por medio de los turistas no queda solo en la comunidad, ese dinero también va a otros puntos del país con la compra de mercaderías que se trae para volver a vender; desde que se cerraron las fronteras muchos proveedores, fabricantes, también quebraron y quedaron sin nada”, finalizó.