Pescadores de Alto Paraguay objetan proyecto que busca adelantar veda pesquera

Los pescadores de esta zona no están de acuerdo con el proyecto que busca adelantar la veda pesquera. Alegan que en aguas compartidas con el Brasil, la prohibición es de 90 días cada año. En caso de un adelanto o aumento, piden que sea solo en aguas compartidas con la Argentina, donde el impedimento es solo de 45 días.

Un pescador ishir muestra los ejemplares de surubí capturados en aguas del río Paraguay y que son comercializados a G. 25.000 por cada kilo.ABC
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“Nosotros somos respetuosos de la ley”, sostuvo Cristóbal Romero, pescador del distrito de Fuerte Olimpo, y agregó que cada año tienen 90 días de veda pesquera, mientras que aguas abajo, en la región Oriental, es de solo 45 días, por lo que en caso de que se adelante o se aumenten los plazos del impedimento debería ser solo para esa zona.

Explicó que aumentar la limitación de pesca sería lamentable, atendiendo a que en el Alto Paraguay se carece de fuentes de trabajo, y la pesca es la alternativa más importante para llevar el pan a los hogares.

Por su parte, Cesar Barboza, pescador ishir del distrito de Bahía Negra, sostuvo que las autoridades nacionales, antes de sacar los proyectos, deberían llegar a estos lejanos lugares para conversar con los autores directos y ver la realidad que se vive de manera diaria.

En caso de que se aumenten los días de veda se debe planificar qué alternativas de trabajo se puede ofrecer a los pescadores y de manera especial a las comunidades indígenas, atendiendo a que varias familias dependen de los ingresos que se generan en esta actividad.

Solo entre los distritos de Bahía Negra y Fuerte Olimpo existen unos 900 pescadores. La mayoría de ellos pertenece a las poblaciones indígenas de los ishir y de los tomarahos.

La prohibición de pescar en estas aguas compartidas con el Brasil es de 90 días, abarcando los meses de noviembre, diciembre y enero, desde la intersección del río Paraguay con el río Negro en la zona de Bahía Negra hasta su unión con el río Apa hacia el sur, en el distrito de Puerto Casado.

A pesar de la bajante, según los pescadores, aún se puede pescar especies como el surubí y en menor cantidad el pacú. El primero de ellos se comercializa a G. 25.000 por cada kilo, mientras que el segundo a G. 30.000.

Existen dos proyectos impulsados por el senador liberal Blas Llano que pretenden adelantar la veda pesquera 2021-2022 y otro que busca prohibir temporalmente la pesca del dorado y surubí.

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