Las podas drásticas que eliminan las ramas grandes y gruesas se practican de marzo a julio preferentemente, y evitando el tiempo de heladas, explicó el ingeniero agrónomo Ricardo Abente.
Corresponde ahora precisamente realizar la limpieza y sanitación de ramas enfermas, una tarea que se puede desarrollar en cualquier época del año, evitando días de excesivo calor, como el mes de enero.
Una buena poda esencialmente controla el crecimiento de la copa y ralentiza el de las raíces, pero no evita que sigan creciendo subterráneamente, según el experto.
La poda de formación se realiza cada tres o cuatro años, dependiendo de la rapidez del crecimiento. Tenga presente que el árbol que se poda es muy difícil que florezca rápidamente, porque las plantas y árboles florecen sobre yemas y brotes nuevos que justamente se cortan.
El corte es necesario para evitar el crecimiento desequilibrado, y el peso excesivo de la masa foliar, que aumenta con el agua de las lluvias, y las raíces no pueden soportarlo. Así se caen vencidos por la fuerza de los vientos y las lluvias de una tormenta.
Las herramientas indicadas son: serruchos y motosierras limpios y libres de herrumbre o bacterias.
Especies para plantar en veredas
En las veredas hay que plantar árboles que no levanten las baldosas, algunas especies recomendadas son: sibipiruna, inga enano, tulipán de la India, lluvia de orquídeas, ovenia, y cualquier tipo de cítricos, como pomelo, naraja y limón, opinó el ingeniero.
Por último, aconsejó que la poda sea realizada por profesionales ya que se ve con frecuencia que especies de 30 años de vida o más mueren por una mala práctica.
Un árbol oxigena el ambiente, hermosea los jardines y veredas, nos cobija de los rayos del sol y le da un plus de belleza a cualquier construcción. Vale la pena cuidarlo.