El 14 de abril de este año, el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, ordenó la suspensión de la licitación para construir el puente, supuestamente para redireccionar unos US$ 30 millones de los fondos sociales de Itaipú al sistema sanitario del país, pero esto nunca ocurrió, pues un mes después, el titular del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), Arnoldo Wiens, reactivó con total sigilo la licitación del paso, según confirmaron en el propio ministerio.
Este anuncio del Gobierno solo confundió a los interesados en participar en el llamado, porque el ministro anunció que la “suspensión” sería hasta mitad de año. Empero, ya el 17 de mayo siguiente decidieron continuar con el proceso, según informaron desde la institución. La reactivación del proceso se mantuvo en secreto, hasta que anunciaron la fecha de apertura de las ofertas para el 14 de julio, que finalmente se “pospuso”, pero apenas dos días, para el 16 de julio.
Llamativamente, según denuncias de constructores, pocas empresas se enteraron de la “reactivación” del llamado y no pudieron presentar sus propuestas, porque estaban obligadas en el pliego a asociarse con empresas brasileñas. Por lo que cada vez más aumentan las sospechas de direccionamiento en esta licitación.
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Lo concreto es que el 16 de julio último, el MOPC recibió las ofertas: El Consorcio Binacional PY – BRA, compuesto por las empresas Tecnoedil Constructora SA y Cidade LTDA y Paulitec Construções (representado por Rolando Ríos Tómboly), con una oferta de G. 616.836 millones; y el Consorcio Puente Bioceánico, integrado por las firmas Ocho A SA y la Constructora Queiroz Galvão SA (Luis Pettengil), que cotizó en G. 637.862 millones.
Sugestivamente, solo Tecnoedil y Ocho A pudieron asociarse con firmas de Brasil y presentar las ofertas en el plazo previsto por el MOPC. Estas empresas son socias en la concesión de Tape Porã y además ejecutan en consorcio uno de los lotes de la licitación de la reconstrucción de la Transchaco (Ruta PY09), concretamente el lote 3 (Km 173-Km 250). Varios referentes de la construcción afirman que habría una “falsa competencia” entre estos “socios” en la licitación del puente bioceánico, porque no dieron más plazo para que más compañías se presenten.
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MOPC intenta defenderse
Finalmente, el MOPC respondió ayer sobre los cuestionamientos de este proceso licitatorio y resaltó que al reactivarse la licitación el 17 de mayo último, “los potenciales interesados contaron con el tiempo suficiente para preparar sus ofertas y competir”.
Pero se “olvidaron” de explicar respecto a los cambios realizados en el pliego y, además, que no informaron en los canales usuales sobre la reactivación de la licitación. Incluso, a solo 10 días de la apertura de ofertas, modificaron el precio referencial de la obra, inflando el presupuesto (US$ 20 millones más), sin la aprobación de Itaipú, que lo financia.
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La cartera solo resaltó que se realizó un análisis sobre las variaciones del precio del acero a nivel nacional e internacional, donde expone que: “La variación de costos del monto estimado (precio referencial inicial) obedece a la actualización de precios en el acero, como se podrá observar claramente en los ítems con costos variados del llamado”. Agregó: “Es de público conocimiento la situación y suba de precios de varios materiales del rubro de la construcción, entre ellos el precio del acero a nivel mundial y que repercute en todos los países”.
Sin embargo, tampoco respondieron sobre las razones del “apuro” para recibir las ofertas sin que Itaipú autorice la modificación de precios. En este caso, para el MOPC fue suficiente “aclarar” que el “presupuesto estaba pendiente de aprobación”.
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Alianza con firmas de Brasil se basa en acuerdo
Respecto a las exigencia de que las empresas debían aliarse obligatoriamente con firmas brasileñas para poder participar, resaltaron que esto “está establecido en la Ley 6086/2018 del acuerdo de la construcción, suscrito entre la república del Paraguay y la República Federativa del Brasil”. En este caso agrega que en el artículo IV, inciso 2, de la mencionada normativa establece que los procedimientos licitatorios del puente están consustanciados en Pliegos Binacionales de Bases y Condiciones.