La intención del gobierno central es prever cualquier desborde que se genere si se dan de manera masiva y continúas los focos de calor. En conversación con ABC Color, Roa confirmó que estaba conversando con el diputado Luis Urbieta (ANR). El objetivo también es coordinar planes de mitigación o de reacción rápida con varias autoridades locales.
En un primer reporte que Roa recabó le dijeron que existen algunas quemas de pastizales que no están generando mucha preocupación porque pueden ser contenidas por los bomberos de la zona. Pero no por eso debe restarse importancia porque el norte está viviendo una sequía importante.
Según, el secretario del Poder Ejecutivo la ausencia de lluvias y la baja temperatura de estos días son un foco de combustión de llamas muy importante. Por esta razón la Secretaría de Emergencia Nacional está utilizando una plataforma de control en varios puntos.
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Con estas reuniones de planificación se verá que está faltando en materia de logística ante un eventual avance del fuego. Situación que normalmente se produce entre los meses de agosto y setiembre. Roa sostuvo que la observación que hace su equipo técnico es rigurosa para estar pendientes.
Después de su encuentro con dirigentes gubernamentales y contras siniestros del primer departamento, el ministro tiene previsto ir al Norte del Chaco en Alto Paraguay, específicamente hasta Adrián Jara. El sector de la región occidental también es un lugar a tener en cuenta por la posible ocurrencia de fenómenos adversos.
Dirección de Vigilancia de la Salud lanza advertencias
En las últimas horas hallaron algunos focos de calor, e inconvenientes hidrológicos sumado al suelo seco. Puntualizando en Concepción se nota en los últimos meses una cantidad exigua de precipitaciones. También alertan de un descenso del río Paraguay muy acentuado a lo largo de su cuenca.
El Centro de Información Epidemiológica realiza un monitoreo de vigilancia ambiental en esta área. Los informes publicados por el ente remarcaron quema de pastizales en las estancias de Arrecife y San Luis, del Parque Nacional San Luis. Pese a este problema no hubo víctimas de afecciones respiratorias ni animales muertos.
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