Los detenidos son Bruno (29), quien sería el líder de la organización familiar, Rolando (23), supuesto encargado de la logística de la estructura y Julio César Enciso Ruiz Díaz (20), mientras Ulises (30), aparentemente logró escapar de su vivienda segundos antes de la llegada de los uniformados.
Gracias a las evidencias incautadas durante los allanamientos, que incluyen dos armas, una pistola calibre 9mm., una escopeta calibre 12, cartuchos, vehículos, un drone, restos de marihuana y otros elementos, ahora los agentes del departamento Homicidios de Canindeyú, al mando del oficial inspector David Delgado van a solicitar la captura de otros dos miembros de clan, menores de edad, quienes también habrían participado en el complot para el mortal atentado, informaron.
Poco antes de las 19:00 del día jueves 10 de junio último, Juan David Arguello Prieto estaba frente a su vivienda, en el centro de Yby Pytá, donde administraba un pequeño comercio dedicado a la venta de comidas rápidas y bebidas. En ese momento se le acercó sigilosamente un sicario con pasamontañas y lo acribilló con una pistola calibre 9mm. La víctima falleció segundos después a causas de las heridas que sufrió, mientras que su atacante escapaba del lugar a bordo del biciclo.
Desde un principio, las sospechas de los investigadores apuntaban a que el crimen se habría dado en el marco de una guerra entre traficantes de marihuana. Más aún, en conocimieno que la víctima era cuñado del exintendente liberal de la ciudad Virgilio Portillo Orué (PLRA), con antecedentes por el mismo delito, señalaron fuentes policiales.
Según los investigadores, desde tiempo atrás ya existía problemas por cuestiones de territorio entre los Enciso y Arguello, debido a que ambos se dedicaban al mismo rubro. En las últimas semanas Arguello efectuó algunas maniobras y contactó con algunos patrones brasileños para acopiar casi toda la producción de marihuana de la zona, hecho que de concretarse iba a representar la ruina económica de los Enciso.
Ante este panorama, estos últimos decidieron cortar definitivamente el problema y aparentemente contrataron un sicario que acabó a tiros con el responsable de los problemas del clan familiar, según explicaron los uniformados.