La fiscala González informó este martes que el Ministerio Público maneja el dato de que Analía Montserrat Rodas Galeano, de 34 años, fue asesinada la mañana del domingo 27 de noviembre en su casa, ubicada en San Antonio. Ayer, sus restos fueron encontrados enterrados en su patio y su hermano, César Fernando Rodas Galeano, confesó haberla matado. Hubo un fuerte cuestionamiento hacia la lentitud de la actuación de la Fiscalía. Fue la agente interina Cynthia Torres quien había iniciado la pesquisa.
González, quien tomó la posta de la investigación junto con la agente Laura Ávalos, conversó con ABC y explicó que Analía tenía dos líneas que usaba en un mismo teléfono. Como recientemente se tuvo el informe del segundo número, se procedió a hacer la intervención ayer, ya que las señales de ambas líneas dejaron de operar el domingo 27 de noviembre en horas de la tarde, en la zona de su casa.
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“Lo que nos llevó a ir al lugar (ayer) fue un informe de la telefonía. Ella tenía dos líneas, pero usaba más una de ellas (…) Se tarda en tener el informe de la telefonía, hay que reconocer. (Buscamos información) sobre el teléfono de ella, del novio y de su hermano (…) El trabajo técnico indicó que ambos números de ella tenían señal hasta el 27 de noviembre, en esa zona, a la tarde”, indicó la agente.
La fiscala González contó que Analía Rodas se dedicaba formalmente a la prostitución a través de un sitio web y que, como parte de ese trabajo, expedía facturas a través de un Registro Único de Contribuyente que llamativamente fue dado de baja hace algunas semanas, ya después del deceso. Este es otro de los puntos que el Ministerio Público está investigando, precisó.
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“La bajada del RUC se da cuando ella desapareció. Lastimosamente no podemos acceder sobre quién dio de baja. Estamos esperando información de Tributación”, manifestó.
Siempre según la agente, la hipótesis central que manejan es que el hermano de Analía la mató porque estaba “harto” de que ella lleve a sus clientes a la casa y no perpetró el hecho de forma accidental, tal como declaró informalmente ayer. Indicó que una de las hermanas de Analía y de César le facilitó un audio de WhatsApp en que este declara que estaba cansado del estilo de vida de su hermana.
“El audio nos facilitó la hermana en estos días. Ahora entregó al agente fiscal y a los investigadores. Nos entregaron algunas capturas de conversaciones entre ellos”, explicó.
La fiscala recordó también que hay varios puntos a indagar en la pesquisa, como por ejemplo encontrar primero el teléfono de Analía con las dos líneas y de donde se podría colectar más evidencias como conversaciones directas que pueden ayudar a dilucidar el homicidio.
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Sobre la demora en la intervención del Ministerio Público, reconoció que la hubo, pero argumentó que se debió a la falta de celeridad en los reportes de las telefónicas.
El Ministerio Público tardó más de seis meses para realizar el allanamiento, pues la denuncia fue radicada el pasado 7 de diciembre por otra hermana, llamada Liliana, quien no tenía ninguna noticia de Analía. César Fernando y Analía vivían solos en la vivienda allanada y él había dicho que su hermana se había ido de viaje a Paraguarí. Este, sin embargo, explicó ayer que supuestamente la mató de forma accidental en el baño tras abrir la puerta de forma violenta.
El abogado de la familia Rodas, Diego Lansac, informó a través de su cuenta de Twitter que esta mañana se hará una inspección a los restos de Analía y que la Fiscalía tomará declaración formal a César Fernando, el homicida confeso.