Los miembros del gremio claman principalmente una mayor inversión en la educación hasta llegar al 7% del producto interno bruto (PIB), además de la concreción del reajuste salarial del 16%, que el año pasado quedó suspendido debido a la pandemia. El Gobierno había prometido a los gremios docentes que el incremento podría darse en el segundo semestre del año, dependiendo de las recaudaciones que se tengan.
Así también el gremio exige la aprobación en el Congreso de una Ley que declare emergencia educativa durante tres años, prorrogables según necesidad, para la compra de insumos de bioseguridad, refacción de instituciones educativa, conectividad, capacitación docente y la contratación de trabajadores de limpieza para escuelas y colegios.
En total, el proyecto de ley plantea una inversión de US$ 400 millones provenientes del cobro de una tasa a las grandes fortunas; una alícuota del 1% al 5% para quienes tengan un patrimonio de US$ 10 millones en adelante.
Este proyecto de la OTEP-SN fue presentado al Senado el 12 de mayo.