Desde hace tres meses nos encontramos en colapso total del hospital respiratorio, con pacientes en el servicio de urgencias totalmente desbordado, existen pacientes en camillas y sillas improvisadas, algunos sin siquiera poder ser asistidos por falta de una sala de reanimación digna, sostiene el Dr. Riveros en una nota dirigida al director de la Séptima Región Sanitaria, Dr. José Acosta, en su carácter de miembro del Comité de Operaciones de Emergencia (COE).
El hospital cuenta con 18 unidades para pacientes terapizados, nueve de los cuales en unidades de terapia intensiva (UTI) y nueve en sala de reanimación. “Los equipamientos ya están en falla, teniendo que hacer intercambios o arreglos parciales, no tenemos renovación de máquinas (respiradores, monitores, bombas de infusión) hace aproximadamente tres meses”, sostiene.
Solicita con carácter de urgencia seis respiradores nuevos, ocho bombas de infusión, seis monitores multiparamétricos, cuatro respiradores y 12 equipos de alto flujo.
No tienen lugar donde ubicar a los pacientes, al punto que entre 20 y 30 están instalados en los pasillos de la sala de urgencias, pudiendo ser internados en el pabellón modular reacondicionado. Para ello, sin embargo, se necesitan al menos ocho médicos, 21 licenciadas en enfermería, y dos auxiliares proveedores y un equipo de radiografía portátil.
El bloque modular se encuentra alejado del edificio principal, donde operan las salas de terapia y reanimación, y por ello debe ser equipado y asignado personal para que pueda funcionar como una unidad independiente al edificio principal. En este lugar fueron habilitadas 25 bocas de oxígeno, pero no se lo puede emplear para la internación de pacientes críticos por falta de médicos y enfermeras que los atiendan.
Planta de oxígeno al borde del colapso
Otra situación especialmente grave que se da en el hospital, y que de producirse una falla implicaría la muerte inmediata de los pacientes internados en terapia y los que se encuentran con asistencia respiratoria es que la planta de oxígeno, inaugurada hace poco más de un año, está trabajando al límite de su capacidad.
“La recarga del tanque criogénico no da abasto para para la cantidad de pacientes que se encuentran en nuestra institución, nuestra planta generadora se encuentra al máximo de su capacidad, solicitamos que la recarga del tanque criogénico sea garantizado, o la instalación de una nueva planta generadora de O2”, señala el profesional.