En este nuevo proyecto legislativo, la AFD plantea, entre otros puntos, diversificar su participación en negocios fiduciarios y Asociación Público-Privada (APP), que le permitan financiar obras de infraestructura de gran envergadura, siempre manteniendo el modelo de banca de segundo piso, que es la esencia de la entidad, señaló su titular María F. Carrón.
La ejecutiva explicó que estos cambios propuestos permitirán modernizar a la AFD y ponerla en contexto de las necesidades del mercado a través de nuevas herramientas ante una economía en crecimiento.
Por otra parte, la propuesta da pie a diversificar costos de fondeos de la institución. Detalló que la AFD cuenta con buenas notas por parte de las calificadores de riesgo, que le permitirá acceder a fondeo a costos más competitivos e incluso sin la necesidad de garantía estatal. Esto a la vez repercutirá en el usuario porque podrá acceder a tasas más accesibles.
Otra arista importante del proyecto es que abre la posibilidad de financiamiento de obras de infraestructura pública principalmente, a través de fideicomisos creados para el efecto. La ley actual impide a la AFD financiar, en forma directa o indirecta, al sector público. Se propone permitir otorgar préstamos, siempre a través de las instituciones financieras, para inversión en infraestructura de empresas públicas y gobiernos subnacionales, como municipalidades y gobernaciones, hasta un 30% del patrimonio neto de la AFD.
La titular de la Agencia de Créditos espera que los cambios sugeridos en la carta orgánica tengan buena acogida y sea aprobada en la brevedad, lo cual permitirá articular acciones rápidas en pos de la reactivación de la economía.