Este procedimiento, que involucra a la central hidroeléctrica Itaipú, se concretó mediante gestiones efectuadas por la Cancillería Nacional ante los gobiernos de Brasil y Argentina, con los cuales se llegó a un acuerdo que permitirá la operatoria para que el río Paraná alcance una altura suficiente y, de esa manera, e garantizar su navegabilidad.
La entidad binacional aclaró que este operativo no afectará la producción de energía de la usina y que se garantizará que un volumen de 125.000 toneladas de producción agrícola, valoradas en unos US$ 45 millones, puedan ser colocados en el mercado internacional de manera competitiva y así salvaguardar la cadena de producción y a la economía del país.
Son seis convoyes en total los que aguardan el paso para llegar a destino.
Según los datos proveídos, el operativo denominado “ventana de agua” permitirá contar con una altura de un metro en el hidrómetro de Ituzaingó, Argentina, durante el 27 y 28 de mayo, suficiente para que los convoyes cargados a un calado de 7 pies y medio puedan atravesar de manera segura los pasos críticos identificados en el río Paraná.
Destacan apoyo
El presidente del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos (Cafym), Esteban Dos Santos, destacó el apoyo y gestión del gobierno, mediante el que se logró esta “ventana de agua” que favorecerá a la navegación. Aclaró que no solo en la zona del Alto Paraná sino también al río Paraná medio en situación crítica. “Continuaremos en conjunto los esfuerzos con Cancillería”, agregó. De esta manera y de modo similar, se repetirá la regulación de caudal que se realizó en tres oportunidades durante el 2020, y que posibilitó la salida de 413 barcazas que transportaron 493.800 toneladas valoradas en US$ 175 millones.