En Pozo Hondo ya es posible tener algo tan sencillo como verduras

Disponer de electricidad tiene un impacto significativo en la calidad de vida de los pobladores de Pozo Hondo, a orillas del Pilcomayo. Pueden disponer de verduras o conservar los peces del río. La escuela del poblado recibió computadoras del Ministerio de Educación.

Los niños de Pozo Hondo tendrá por primera vez en sus manos computadoras. Los equipos fueron entregados por el Ministerio de Educación.
En Pozo Hondo por fin pueden conservar verduras para consumir.
audima

En la casa puede faltar un sinfín de electrodomésticos, pero no una heladera. El clima de nuestro país no permite prescindir de ella.

En el Chaco la situación es peor por el tremendo calor que se puede enfrentar en los meses de verano.

Los pobladores de Pozo Hondo, en la frontera con Argentina y Bolivia, no tenían luz eléctrica, a diferencia de sus vecinos. Para tener hielo contenido en un envase de gaseosa de litro y medio debían pagar 15.000 guaraníes, por ejemplo.

El pasado 9 de abril, el titular del Poder Ejecutivo, Mario Abdo Benítez, inauguró el tendido eléctrico hasta el pequeño poblado de Pozo Hondo. La ANDE invirtió 10.000 millones de guaraníes en las obras.

Disponer de electricidad cambió las condiciones de vida de las 100 familias que habitan en este rincón de la geografía patria: ahora sí pueden tener algo tan esencial como un refrigerador.

Alberto Jaime, poblador del lugar, mencionó que “llevo viviendo más de 40 años en Pozo Hondo y por primera vez tengo la oportunidad de conservar verduras. Para nosotros era imposible pensar en tenerlas. El tremendo calor que soportamos en el verano no permitía tener verduras o frutas por varios días”.

Agregó que “lo mismo sucedía con los peces. El río Pilcomayo es generoso en extremo pero no teníamos forma de conservar los pescados. En los meses de inundación se tiene buena pesca, pero todo se echaba a perder porque no teníamos cómo conservar”.

Pozo Hondo se encuentra a orillas del Pilcomayo, un río extraordinario en cuanto a variedad y tamaño de peces. Sin electricidad, es imposible pensar en la conservación de las piezas extraídas.

Puede parecer trivial para el lector el entusiasmo de los pobladores de Pozo Hondo por la llegada de la energía eléctrica, pero para ellos implica una mejor calidad de vida, en un ambiente que muchas veces se presenta hostil en términos ambientales.

Por fin conocerán una computadora

Si la gente de Pozo Hondo está entusiasmada con la avenida de acceso y el puente sobre el Pilcomayo iluminados, los niños están de parabienes: por fin van a conocer y utilizar una computadora.

El Ministerio de Educación entregó 20 equipos informáticos que serán utilizados en la formación de los niños.

El director de la escuela, profesor José Ramírez, explicó que “vamos a organizar una sala de computación. Con el polvo que tenemos en Pozo Hondo no van a durar los equipos si no los resguardamos”.

Reconoció que será la primera vez que los niños de Pozo Hondo tendrán una computadora en sus manos: la mayoría ni siquiera conoce en fotografías un equipo informático.

En la comunidad se instaló la repetidora de una empresa celular y cuentan con internet. Los niños podrán conectarse a un mundo que supera el arenal que rodea al poblado.

Ahora el tema es conseguir una impresora. Deberán organizar algún sorteo para comprar una. Increíble lo lejos que está Pozo Hondo del resto del país.

Carencia de una ambulancia

El poblado de Pozo Hondo cuenta con una Unidad de Salud de la Familia (USF), donde la licenciada en enfermería Hayde Jacqueline Jaimes presta servicios.

Pozo Hondo contaba con una ambulancia. El vehículo tuvo averías y lleva más de dos años en un taller.

Pozo Hondo se encuentra en el extremo noroeste del Paraguay, a 850 kilómetros de Asunción.

El hospital más cercano se encuentra a 260 kilómetros, en Mcal. Estigarribia.

En estas condiciones, la ambulancia es supervivencia.

roque@abc.com.py

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