El hecho se registró a las 00:15 de este Jueves Santo en el barrio San Miguel de la ciudad de Ypané, donde Roberto Darío Peralta López, de 30 años, acusó un disparo de arma de fuego en el lado izquierdo del pecho, cerca de la axila, por parte de Hugo Dávalos Rolón, quien esta mañana se puso a disposición en el Puesto Policía N° 005 de San Isidro de este distrito de Central.
El jefe de la dependencia policial, suboficial mayor Ovidio Sánchez, señaló que ellos acudieron al lugar y auxiliaron a la víctima, que cuenta con prohibición de salir del país, además de portar armas y antecedentes por hurto.
Peralta López primeramente fue trasladado al Hospital Distrital de Ñemby y, de ahí, fue derivado al Hospital de Trauma de Asunción, donde quedó internado. El mismo se encuentra fuera de peligro y aún no fue sometido a una cirugía para extraer el proyectil.
Agentes de Criminalística se constituyeron en el puesto policial donde realizaron la prueba de parafina al detenido Hugo Dávalos, con quien, posteriormente se trasladaron hasta su vivienda para recolectar evidencias.
Según datos aportados por Sánchez, Roberto Peralta se encontraba participando de un juego de vóley a dos cuadras de donde ocurrió el hecho. Luego, supuestamente le habrían dicho para que compre más bebidas, pero bajo la advertencia de que el despensero, Hugo Dávalos, era muy argel.
Ya a la medianoche Peralta primero fue a su casa -ubicada frente al comercio- para tomar un puñal y un machete. Después cruzó la calle y comenzó a golpear la reja de la vivienda de Dávalos, quien al escuchar el ruido salió a ver y se encontró con el ofuscado hombre.
Peralta en un primer momento, según relató Dávalos, le exigió que le venda cerveza, a lo que el comerciante le dijo que no y que se fuera, sin embargo, Peralta le lanzó primero el puñal que afortunadamente no le alcanzó al dueño de casa, pero sí rompió una botella de vidrio.
Acto seguido, Peralta abrió el portón de Dávalos e ingresó al sitio, tomó un pedazo de vidrio e intentó herir al comerciante, pero sin éxito. Posteriormente, hizo otro intento, esta vez ya con el machete ínterin en que el despensero, que ya había tomado su arma, efectuó un disparo que dio en el pecho de Peralta.
Dávalos, en shock, corrió hacia un yuyal ubicado a 50 metros de su casa y la escondió entre el tronco de un árbol. De hecho, esta mañana, él, su abogado Carlos Centurión, junto con uniformados del puesto policial y de Criminalística, fueron a buscar el arma, pero no la hallaron, por lo que se presume que alguien vio lo que hacía el despensero y luego se alzó con la misma. El caso fue comunicado al Ministerio Público y Hugo Dávalos quedó a disposición.